Con un emotivo homenaje, diputados nacionales evocaron la figura de la fallecida Margarita Ferrá de Bartol durante la sesión de ayer en el recinto de la Cámara Baja, en el que se había previsto debatir el proyecto de responsabilidad del Estado.
Antes de abocarse a la discusión del proyecto de responsabilidad del Estado, el pleno de la Cámara de Diputados de la Nación rindió un homenaje a Margarita Ferrá de Bartol, la diputada nacional por San Juan del oficialista Frente para la Victoria (FpV), que falleció el pasado 11 de octubre pasado cuando cayó el helicóptero en el que viajaba junto al gobernador de San Juan, José Luis Gioja, y Daniel Tomas. El acto comenzó con la lectura de una carta enviada por el diputado nacional por San Juan, Héctor Daniel Tomas, del FpV -quien todavía no se reintegró a la labor parlamentaria-.
Según el diputado nacional por San Juan, José Rubén Uñac (FpV), el homenaje duró cerca de 45 minutos. Al hacer uso de la palabra, el legislador del oficialismo destacó en el homenaje de ayer que la fallecida Ferrá de Bartol fue ‘una gran amiga, aunque también una persona capaz de dar consejos muy maternales. Nos dio una ejemplo de vida a través de su militancia y su vinculación a la cultura’. Para el ex vicegobernador sanjuanino, Margarita ‘siempre siguió sus convicciones y defendió sus ideales, desde su lugar en la militancia, que ocupó desde muy joven. Era una persona con la que se podía tener un diálogo muy fluido’.
En diálogo con DIARIO DE CUYO, Uñac detalló que asistieron al homenaje los tres hijos de Ferrá de Bartol y el intendente de Rawson, Juan Carlos Gioja. En el homenaje, que se realizó pasado el mediodía, la diputada nacional por San Juan, Graciela Caselles, fue otra oradora clave de la ceremonia.
“Fue una gran historiadora, una gran profesional y maestra. Todas las virtudes se quedan chicas cuando uno tiene que definirla como una gran persona. No decía nunca que no a la hora de ayudar al otro. Tenía el corazón abierto siempre, no le importaban las diferencias. Era una mujer humilde”, la definió Caselles. Ferrá de Bartol “convirtió su vida y la política como un servicio a la comunidad. Siempre se preocupó porque el que esté al lado esté mejor. Era sumamente solidaria”.
