El tercer dique sobre el río San Juan cada vez toma más forma y fue el propio gobernador Gioja quien confirmó que se está por empezar a embarcar desde Rusia ‘’el corazón’’ del dique Punta Negra: se trata de dos turbinas y sus respectivos generadores que se instalarán en la Sala de Máquinas y permitirán disponer de una potencia de 62 megavatios, o sea la mitad de lo que tiene Los Caracoles (120 MW) y un 31% más Ullum (47 MW). La obra completa del dique llegó al 58% de avance, y esperan que esté en condiciones de embalsar en noviembre de 2014 y terminada recién en marzo de 2015.

‘’Estuvo Doña (presidente del EPSE) hace unas semanas en Rusia ajustando todo para que empiecen los embarques con lo que falta. La obra civil de la Sala de Máquinas va encaminada y hay que ir armando toda la parte electromecánica, de abajo hacia arriba, por lo que hay que tener las cosas acá pronto’’, explicó Gioja. En este sentido, el sábado pasado llegó la cámara espiral, una especie de tubo gigante armado en talleres de Buenos Aires y Mendoza que toma el agua del túnel y la lleva hasta el área de generación. Esa estructura ya se montó, al igual que el difusor y el cono (ver infografía).

Los equipos que llegarán a la provincia son los mismos que se instalaron en el dique Los Caracoles, con la diferencia que la potencia de las turbinas -tipo Francis- es menor, en este caso de 31,1 megavatios cada una. Es que la potencia está atada al caudal y a la altura, y Punta Negra está más bajo que la presa que se terminó en 2009, por lo que el salto de agua permite una generación menor.

La colocación de todo el equipo de generación tiene otro nivel de avance -explicaron- que la obra civil, más lento. Cada pieza debe ser calibrada a la perfección para que a la hora de la puesta en marcha, una vez que se embalse y se decida empezar con las pruebas, no acarree fallas.

En qué se está trabajando:

En estos momentos hay al menos 4 frentes de obra abiertos: en el aliviadero trabajan con el canal de descarga y el talud de sostenimiento, obra que ha traído varios problemas en su ejecución. En la presa propiamente dicha, el trabajo se enfoca en el relleno, la cara de hormigón armado -el paredón, como popularmente se lo llama- y la inyección de material en la roca, tarea que permite solidificar el anclaje del pie de presa. Por su parte, en la obra de toma están con el hormigón armado de la embocadura; mientras que en la casa de máquinas, lugar donde estarán las turbinas, están avanzando con la obra civil y la parte electromecánica.