Uno de cada 3 franceses tendrá más de 60 años en 2060, cuando el país prevé contar con unos 200.000 centenarios, según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (INSEE) publicadas ayer.

En pleno debate sobre el retraso de la edad de jubilación, justificado por el Gobierno ante el envejecimiento de la población, el instituto señaló que el número de mayores de sesenta años aumentará en 10 millones en los próximos 50 años por el incremento de la esperanza de vida.

Así, en 2060 Francia contará con 73,6 millones de habitantes, 11,8 millones más que en 2007, al tiempo que la pirámide de población envejecerá de forma muy importante hasta 2035 y más moderada en los siguientes años.

Dentro de 50 años, el número de mayores de 60 años será de 23,6 millones, un 80% más que en 2007; el número de mayores de 75 años pasará de 5,2 millones a 11,9 millones y el de mayores de 85 años de 1,3 millones a 5,4 millones.

En paralelo, el INSEE augura un incremento de la población de menores de 20 años, pero muy inferior a la de los ancianos, lo que hará que su peso en el total de la población se diluya, pasando de ser un 25% en 2007 a un 22% en 2060.

En cuanto a los centenarios, su número puede multiplicarse por 3 en 52 años. Según los diferentes modelos estadísticos, el número de centenarios puede llegar a los 380.000 o quedarse en 12.000, aunque el INSEE apuesta por los 200.000. En la actualidad Francia cuenta con 15.000 centenarios, lo que ya supone 3 veces más que en los años 60 y 70, y su número crecerá de forma importante, en particular entre las mujeres. Así, 9 de cada 10 centenarios son de sexo femenino y apenas hay hombres entre los que superan los 110 años.

El estudio del INSEE muestra también que desde 2006 aumentó el número de fallecimientos en Francia por el envejecimiento de la población, un fenómeno paralelo al aumento de la esperanza de vida, que era de 84,5 años para las mujeres en 2009 y de 77,8 para los hombres. En ese capítulo, Francia se sitúa como cuarto país de la Unión Europea, por detrás de Italia, Suecia y España.

En términos porcentuales, el descenso de fallecimientos se produce en todas las franjas de edad excepto en la mortalidad infantil, que desciende en todos los países de Europa pero se estancó en Francia a partir de 2005 y crece desde 2009. Así, Francia pasó de ser el quinto país europeo con menos mortalidad infantil en 1999 al puesto décimo cuarto en 2008, por detrás de Grecia y España.

Por otra parte, el Senado francés dio ayer su aprobación definitiva a la reforma de las pensiones, que elevará dos años la edad mínima legal de jubilación en Francia, el plan eleva la edad mínima legal de jubilación de los 60 a los 62 años.