"Yo siempre priorizo la decisión del jugador y Pablo me confió que le duele. Por eso estoy preocupado y veo muy difícil que pueda jugar". Textual del técnico de Sportivo Desamparados, Mauricio Magistretti, quien cuando parecía tener todo decidido para el partido de mañana en San Luis ante Juventud Unida, ahora tiene este gran interrogante por delante.
La molestia en la rodilla izquierda de Pablo Pelayes empezó después del entrenamiento del viernes de la semana pasada. En el fútbol reducido de ese día, Pablo chocó con Juan Sosa y sintió el golpe en la parte lateral externa de su rodilla izquierda. Lo medicaron, hizo kinesiología y le alcanzó para jugar contra Central Córdoba. Pero en esta semana no pudo entrenar con normalidad y el jueves, día de fútbol, vio la práctica desde un costado. Ayer, no pudo entrenar normal y Magistretti decidió charlarlo con el propio arquero para tomar una determinación.
"En estos casos, la última palabra la tiene el jugador. Se lo dije a Pablo y también le expliqué que había que tomar una decisión. Vamos a ver como evoluciona en estas horas pero lo que más me inquieta que sintió dolor y contra eso, por más desinflamatorios y analgésicos que se le administren, es difícil. Por ahí, lo mejor será que pare y que se reponga totalmente de cara a lo que se vendrá pero el amor propio del jugador pesa y por eso vamos a decidir hoy antes de viajar a San Luis", sentenció Magistretti.
La historia de Pelayes en el arco de Sportivo Desamparados es muy especial. Junto a Emanuel Guirado fueron parte de una cosecha de alta calidad y a la hora del gran salto, Guirado le sacó ventajas. Pelayes nunca se desesperó. Entrenó, apoyó, esperó su momento y en esta temporada se le dio cuando vendieron al Manu. Claro, casi que fue de rebote como se adueñó del arco porque no arrancó como titular con Dillon pero en la fecha 4, antes de viajar a Santiago del Estero, se lesionó Leandro Evangelisti y Pelayes entró para nunca más salir.
Ahora, otra vez una lesión en el medio, lo podría sacar del arco pero solamente Pablo sabe lo que esperó este presente titular. Por eso, aunque el dolor sea grande, para que lo saquen del arco, tendrá que estar muy lesionado.
