Con menos gente que en años anteriores, en los distintos campings de la provincia los jóvenes recibieron ayer la llegada de la primavera chayando y comiendo choripanes, que resultó ser el menú preferido del Día del Estudiante. Salvo el Camping Santa Lucía y el Sindicato Empleados de Comercio, el resto de los clubes recibieron a escasa cantidad de adolescentes e incluso algunos permanecieron cerrados.
Con el güiro de su amigo Gabriel en la mano, Agustín Riveros fue el encargado de ponerle ritmo al festejo de la primavera de una veintena de chicos y chicas en el camping del Sindicato de Empleados de Comercio, mientras la segunda vuelta de choris empezó a circular.
El ritmo se mezcló con la música y con los gritos de los que corrían tirándose agua, al mejor estilo chaya carnavalera, para aplacar un poco el calor de la tarde. Los que ayer por la tarde todavía tenían energía armaban un partido de vóley o de fútbol mixto, mientras los más pasivos optaban por un truco sobre el pasto. “Es que bailamos todo el día”, justificó Melina, del Colegio San Vicente, mientras revisaba las fotos que se había sacado junto sus amigas con el teléfono celular.
En el Municipal de Rivadavia la música fue la opción predilecta. En varios grupos eligieron pasar la tarde tocando la guitarra y cantando, mientras los restos de asado descansaban en la parrilla a la espera de alguno que se quedó con hambre. En Pocito, el camping de Luz y Fuerza mostró un panorama bastante tranquilo, con apenas una cincuentena de chicos que correteaban a sus anchas en la cancha de fútbol. Y el camping Don Bosco, ubicado en Santa Lucía, permaneció cerrado por la tarde.
El gancho que atrajo a gran cantidad de jóvenes al camping Santa Lucía fue la fiesta organizada por una radio del departamento. Ya desde temprano un desfile de modas con chicas de colegios del departamento arrancó el entusiasmo que se hizo más intenso con la presencia de Los Rebos, humoristas del programa televisivo Sin Codificar, quienes una vez terminado el show se quedaron para sacarse fotos con el público. Después vendría la presentación de bandas de rock, con invitados de afuera, como los mendocinos de Mono Floro y Cadena Perpetua, de Buenos Aires.
La mayoría de los campings empezó a cerrar temprano, cerca de las 18. Fuentes de la Policía de San Juan afectadas a la tarea de control y prevención, afirmaron que la intención era permitir que aquellos grupos de jóvenes que quisieran hacerlo, pudieran desplazarse con tranquilidad hasta el Parque de Mayo, para disfrutar del espectáculo musical en ese sector.
