La llegada de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a la provincia ocurre en un momento de alto apoyo popular: 6 de cada 10 sanjuaninos avalan su gestión tras más de 4 años de estar al frente del Ejecutivo nacional, arrastrados esos guarismos en buena parte por la imagen positiva que timonea desde hace 8 años el gobernador Gioja y que por estos días se ubica encima del 70 por ciento. Es que según se desprende de la última encuesta realizada en exclusiva para DIARIO DE CUYO por parte del Instituto de Opinión Publica y Políticas Sociales (IOPPS), el 60,4 por ciento de los consultados califica como ‘positiva’ la imagen presidencial, el 18 por ciento la desaprueba y el restante 21,6 por ciento la considera ‘neutra’, es decir que aprueba algunas cosas y otras no.
En tanto que en el balance global y tomando como referencia histórica el mes de febrero del 2008 -a casi 100 días de su primera asunción-, la evolución de la imagen presidencial tuvo oscilaciones fortísimas, que como ‘sismos’ políticos se pueden encuadrar en dos momentos claves: la crisis con el sector del campo que desencadenó largos cortes en las rutas del centro del país y que pusieron en jaque la provisión de alimentos, llevó a que apenas el 18,9 por ciento de los sanjuaninos le dieran el OK a la gestión. Incluso, fueron épocas donde el ‘mimado’ de la gente pasó a ser el otrora vicepresidente Julio Cobos, que con su ‘no positivo’ desató la madeja. Como contrapartida, el salto que dio la imagen presidencial poco después de la muerte del ex presidente Néstor Kirchner en octubre del 2010, cuando alcanzó el 60,3 por ciento y que mes a mes fue en alza. Pero en junio del año pasado, a pocos meses de ir a las urnas y tras la enmienda constitucional para habilitar a José Luis Gioja a competir por un tercer mandato, logró en la provincia su performance más destacada desde que sucedió a su esposo: 72,7 por ciento. Ubicándose por esos meses entre los distritos que mejor rendimiento tuvo.
En el medio, la imagen de la Presidenta por estos lares ostentó lauros nada despreciables, como por ejemplo estar desde el mes de junio del año 2010 y hasta la fecha, siempre por arriba del 50 por ciento, casi que emulando el fervor popular que despertó el patagónico en sus 4 años de gestión. Así y todo, cada vez que la primera mandataria pisó el árido suelo provincial siempre, en mayor o en menor medida, tuvo en la calle un masivo apoyo, permitiéndose en varias de esas oportunidades ‘romper’ el protocolo y acercarse a la masa que la vitoreaba.
Pero mirando el vaso medio lleno, detrás de ese 60,4 por ciento que ubicó el IOPPS a la imagen de Cristina en este mes, viene un marcado descenso de la aprobación popular de la gestión K. Los números indican que luego de las elecciones de octubre pasado, mes en que las urnas y las encuestas pusieron muy alto el apoyo en San Juan, fue decreciendo la imagen, haciendose más brusca esa caída desde febrero a esta parte cuando bajó 6,5 por ciento. Que en apenas 60 días la curva se haya tornado descendente no tiene por parte de los analistas una explicación concreta, de acuerdo a que en lo personal Cristina no tuvo ningún traspié de peso, aunque sí es cierto que debió cargar con la ‘mochila’ que le puso en las espadas del Gobierno las denuncias que recayeron sobre el vicepresidente de la Nación, Amado Boudou.
Incluso en la última medición del IOPPS no está tomado el impacto de un acontecimiento histórico como fue la decisión gubernamental de estatizar la petrolera YPF, que causó al menos en lo mediático un cimbronazo que trascendió prácticamente a todo el mundo, porque toca los intereses económicos de la poderosa España. En lo cotidiano está tal vez el talón de Aquiles de esa caída en las encuestas -afirman algunos economistas-, de acuerdo a que el tema inflación (incluidos faltantes en las góndolas) e inseguridad, son dos de esos puntos que más críticas acumulan entre la población.
