El ministro de Infraestructura, José Strada, pasó por el programa “A todo o nada” de Radio Sarmiento y habló sobre obras claves que la gestión giojista está llevando adelante. Así, comentó que el objetivo entre argentinos y chilenos es que octubre del año que viene comiencen los trabajos para la construcción del túnel de Agua Negra. Destacó que, a más tardar, en la primera semana de junio van a llamar a licitación para la construcción de 3.500 casas, que estarán distribuidas en el Gran San Juan. El funcionario también habló de política. Dijo que le gustaría ser Gobernador, aunque aclaró que no se anota en ninguna lista porque el primer candidato es José Luis Gioja.
-El gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, visitó la provincia el jueves, ¿qué implica este apoyo para Agua Negra y por qué es valioso lo que firmó con Gioja?
-La historia del Túnel ya está trazada. Hay una instrucción muy clara de las presidentas (Cristina Fernández, de Argentina, y Michelle Bachelet, de Chile) en terminar los instrumentos legales que están en danza en 90 días para licitar la obra antes de que finalice el año. Ese anuncio de las presidentas no es voluntarioso, es el resultado de un trabajo de 11 años y tanto Obras Públicas de Chile como de Argentina les han informado a las mandatarias que la obra está en un grado de madurez para licitarse antes de fin de año, es decir, terminar con el proceso licitatorio. Pero el Corredor Bioceánico, que son 2.470 kilómetros de extensión, desde Porto Alegre, Brasil, a Coquimbo, Chile, es mucho más que el túnel. Éste va a estar listo dentro de 6 o 7 años, dependerá de la empresa que lo construya. Pero el túnel es un elemento del Corredor, y en éste, hay interacción con Santa Fe, que está ampliando sustancialmente su puerto para poder concentrar carga y sacarla por el Pacífico, proceso que se ha gatillado cuando el túnel comenzó a vislumbrarse cuando ya estaba la decisión política de hacerlo. Entonces, hablamos con la gente de Santa Fe y seguramente lo vamos a hacer con el resto de las provincias intermedias, con la gente del Estado Grande Do Sul, en Brasil, y la gente de Coquimbo porque también hay que ocuparse de la logística que tiene que apoyar el Corredor que es un tema bastante complejo.
-¿El puerto de Santa Fe tiene la misma capacidad que el de Chile?
-El que se está preparando en Santa Fe es mucho más grande que el actual de Chile, pero el de Coquimbo también está en proceso licitatorio y antes de fin de año creo que va a haber novedades. Estuve hablando con el ministro de Obras Públicas de Chile y como que no vale la pena preocuparse, por ahora, de la ampliación del puerto y la logística del Corredor. Si bien ya estamos mirando qué hacer, una vez que el túnel comience a construirse, los actores privados van a comenzar a tomar protagonismo y el Puerto de Coquimbo va a tener muchísimas novias.
-De hecho, cuando vinieron de Coquimbo a anunciar la ampliación, el argumento que traían era precisamente el túnel de Agua Negra.
– El puerto de Coquimbo, como está hoy, no puede soportar la carga que vislumbramos que va a salir por el Corredor. Si uno mira la geografía y por donde está pasando el tránsito hacia Occidente, está pasando por el canal de Panamá. Hay 2 canales, se está poniendo un tercero y ya no hay posibilidades de ampliarlo, aunque se sabe que la demanda lo va a superar. El resto pasa por el Cristo Redentor, en Mendoza, que ya está saturado en condiciones normales. Imagínense dentro de 4 o 5 años más. El resto se deriva al canal de Magallanes. La potencia que tiene para nosotros el puerto de Santa Fe es que puede concentrar la carga que viene del Sur de Brasil y la que viene a través de la hidrovía, desde el Norte.
-¿La potencialidad del túnel va a ser mayor que el paso por Mendoza?
– Estimo que sí. Creo que son complementarios. El Cristo Redentor tiene un gran flujo de camiones, son miles por día, pero está saturado, esa es la realidad. Además, se corta en invierno 40 días. El túnel no es que le va a quitar carga, le va a solucionar un problema a Mendoza, mientras se habilitan otras vías. Está el túnel de Las Leñas y posiblemente en el futuro, el corredor ferroviario. En ese sentido, es inexorable una conexión ferroviaria porque los mercados Asia Pacífico están en expansión. La foto actual es que se va a intensificar el tránsito de mercadería.
-¿Cómo va a manejar el Estado los negocios alternativos alrededor del túnel y el corredor?
-Creo que hay que dejar que la actividad privada, con su iniciativa y sus inversiones, explote todo lo que va a brindar el hecho de abrir una puerta, una salida hacia el Pacífico. Nosotros hicimos, en el arranque, un estudio del impacto económico potencial que tenía el túnel en Coquimbo, en San Juan y en las zonas colindantes a efectos de vislumbrar si había que prepararse y cómo para aprovechar esa potencialidad. Uno puede hacer conjeturas, pero son más los negocios no visibles que los que uno puede en una lista. La potencialidad es enorme. No es solamente un problema local de cómo puede mejorar su capacidad productiva, de cómo se le puede dar valor agregado a los commodities que vengan para cruzar la frontera con menos costos, transportar menos productos primarios y más elaborados. Y este análisis no es solamente para San Juan sino para toda la zona circundante.
-En la construcción del túnel, ¿cómo van a manejar los temas como regímenes laborales tanto en Chile como Argentina y la seguridad, entre otros? ¿Se va a copiar lo que se hizo en el proyecto minero binacional Pascua-Lama?
-Pascua-Lama ha sido una base para el acuerdo binacional, que nosotros lo hemos reflejado en el segundo protocolo. Sí hay que ver bajo qué leyes laborales trabaja un empleado que está en la zona binacional, hay que ver también cómo se hace con el tránsito de bienes y mercaderías que se van a consumir en la obra, las que vienen de Chile y de Argentina, cómo se va a regular el tránsito por el actual paso de Agua Negra, que va a mantenerse abierto, y una innumerable cantidad de temas.
-¿Va a haber alguna imposición para que las personas que trabajen allí sean sanjuaninos, con proveedores locales?
-La legislación chilena, en el cuidado de la libre competencia, es un poco remisa a establecer algún tipo de regulación en ese sentido, pero la obra es binacional y va a tener un digesto de normas que son propias de la entidad binacional, no son ni las argentinas, ni las chilenas, son una normativa distinta. Eso es lo que más o menos estamos acordando y sí hemos hablado, aunque todavía no está plasmado en ningún documento, de mantener una cierta participación de empresas argentinas y chilenas y también de dar preferencia en la ocupación, a la mano de obra local.
-¿Cuándo empiezan a perforar?
-Tenemos 3 meses a partir de hoy, para terminar todo. Estimamos que antes de que finalice el año, será en octubre, podemos llamar a las empresas… Tenemos, por el tipo de obra, por la complejidad, a partir de octubre, 4 meses mínimos, para darle tiempo a las empresas para que estudien la obra, presenten alguna eventual alternativa de optimización y se estructure el financiamiento. Eso nos llevaría a febrero o marzo de 2015, para recepcionar las ofertas en función de la cantidad de oferentes que hubiese. Tenemos que tomarnos tiempo para analizar a quién se le adjudica. El objetivo es que en octubre o septiembre del próximo año empecemos a trabajar.
-¿Han hecho una actualización de costos para saber cuánto cuesta la construcción del túnel hoy?
-Tenemos una evaluación de fines de abril de 1.260 millones de dólares.
-¿Cómo le cayeron las declaraciones del secretario Mayoral, quien le pidió al Gobierno de Chile que se ponga los pantalones largos para resolver el tema ambiental de Pascua-Lama?
-Tal cual lo dijeron las presidentas en el último encuentro que mantuvieron, cuando un tema está en instancia judicial no vale la pena referirse al tema. No es conveniente decir nada, a favor ni en contra. Lo más atinado es decir que hay que dejar que la Justicia decida sobre el procedimiento a seguir.
-Entonces se equivocó Mayoral…
-No sé, no quiero abrir juicio sobre eso.
-¿Puede complicar un hecho de este tipo las relaciones entre los 2 países?
-No me parece porque la vía de los proyectos ya tienen una dinámica propia y se ha establecido una relación casi profesional detrás de esta obra.
-¿Qué se está haciendo para que la gente que se quedó sin trabajo en Pascua-Lama tenga ocupación?
-Nosotros hemos activado un plan importante de obras públicas, por ejemplo tenemos más de 300 obras en ejecución, con una inversión considerable.
-¿Ahí están las grandes obras también?
-Están el Teatro del Bicentenario, el Museo de los Dinosaurios, la Obra Social, Bomberos, el edificio para el 911, son todas obras de envergadura que ocupan una cantidad importante de personas. Son más de 300 obras en total.
-¿Todas están en ejecución?
-Todas las obras mencionadas están en ejecución, a lo que hay que sumar el Sistema Cloacal de Rawson y el de Chimbas. También está el dique de Punta Negra, que ocupa a casi 1.300 personas, y estamos viendo la forma de que cuando la obra empiece a declinar, la podamos enganchar con El Tambolar. Además hay puestos sanitarios, comisarías, escuelas, cloacas, agua potable, pavimentos, la Ruta 150.
-¿Cuánta gente está trabajando en estas más de 300 obras en ejecución?
-Entre las viviendas y estas otras obras calculamos que hay entre 7.000 a 8.000 personas ocupadas. Esto es sólo en obra pública.
-Es un poco menos de la gente que quedó desocupada en Lama.
-Por supuesto, y también había mucha gente que ya estaba trabajando en obras en ejecución, no es que se haya partido de cero. También estamos tratando de incorporar más viviendas, actualmente tenemos 4.200 en ejecución y estamos por firmar contratos por unas 1.000 más. Además, en el Procrear hay unas 700 más, que podrían elevar la cifra a unas 6.000 en ejecución. Esa cantidad de casas significa unos 7.500 puestos de trabajo. También en unos días vamos a licitar la construcción de unas 3.500 viviendas.
-¿Cuándo sería eso?
-Calculamos que en la primera semana de junio a más tardar. Ya está el pliego listo y se publica en unos días más. Son la mayoría casas en el Gran San Juan, pero también hay algunas en los departamentos periféricos.
-¿Son casas para erradicación de villas?
-No, hay de todo. Incluso con las 1.000 que se han empezado también hay para el sector de demanda libre. Por supuesto que vamos a seguir con el plan de erradicación de villas porque no quedan tantas.
-¿Cómo ha impactado la inflación en su Ministerio, en los contratos, las obras?
-Tuvimos una sacudida importante, sobre todo a principios de este año, cuando se produjo el cambio del valor del dólar. De todas maneras, en ese momento hablamos con el Gobernador luego de haber escuchado a las empresas y racionalmente entendimos que teníamos que tomar algunas medidas correctivas. Entonces cuando la variación de precios supera al 2 por ciento se gatilla automáticamente un proceso de redeterminación de todo lo que falta de manera de acompañar más de cerca el proceso de evolución de precios. Eso lo hicimos retroactivo al 1ro de enero, para que los empresarios pudieran soportar mejor el cimbronazo que hubo.
-En algún momento a usted se lo nombró en el grupo de dirigentes anotados en el lote de los que quieren gobernar la provincia, ¿es así?
-No sé si lo dije o no, pero voy a repetir lo que dice el Gobernador, cuando sostiene que todo obispo quiere ser Papa.
-¿Y a usted le gustaría?
-Vengo trabajando en política desde que asumí la función. Y la política es hacer posible lo que quiere la gente, que es lo que hacemos en el Ministerio todos los días. Si me pregunta si me siento con capacidad digo que sí, si me pregunta si me gustaría respondo que sí, pero si me pregunta si soy candidato le digo que no.
-¿Sería un error decirlo ahora?
-Sí porque tenemos una tarea muy clara y definida, que nos demanda todo el tiempo. Después veremos, pertenezco a una estructura, el Gobernador juzgará qué es más conveniente, a quién habilita y a quién no, pero no es un tema que me preocupe por ahora.
-Hoy hay figuras como Uñac o Lima que tienen ganas de anotarse, aunque se cuidan de decirlo. ¿Usted se anota en ese grupo?
-No, no me anoto y tampoco creo que ellos se anoten. En el justicialismo hay un montón de compañeros que tienen sobradas capacidades para pretender conducir la provincia.
-De todos los dirigentes que tienen ganas de gobernar a esta provincia, ¿por qué Gioja debería elegir a Strada?
-El primer candidato para mí es José Luis Gioja y creo que sería lo mejor que le puede pasar a la provincia es que el Gobernador estuviese dispuesto a seguir en la posición en la que está.
Obviamente que con aprobación de la Justicia. Eso sería lo mejor, pero por lo demás, creo que todos los que tenemos vocación de servicio estamos dispuestos a asumir el rol que nos toque.
-¿Pero cuál es la mejor característica que usted puede ofrecer?
-Cuando uno le ha puesto el hombro durante tantos años a la provincia, lo que dice es que al menos le gustaría estar en la discusión para que todo lo que se ha hecho siga por el mismo cauce. De decir yo quiero aportar a decir que yo quiero ser Gobernador hay un camino muy distinto.
-¿Si el candidato no fuera Gioja, se animaría a ir a una interna?
-En este momento no tengo nada definido, voy a jugar en el rol que me toque.
-¿Si el Gobernador abre el juego usted al menos quiere estar?
-Prefiero no opinar.
-De los precandidatos del peronismo a nivel nacional, ¿cuál le gusta más?
-No tengo una definición y estimamos que antes de definir un candidato hay que hacer los mejores esfuerzos para unir al justicialismo.
-Si bien Gioja tampoco se ha definido públicamente, se lo ve más cerca de Scioli. ¿Puede ir por ahí la continuidad?
-No soy vocero de Gioja, lo que he escuchado y es su voluntad es que hay que trabajar para cobijar dentro del justicialismo a la mayor cantidad de referentes posibles.