Como si fuera un capitán de un gran transatlántico, el régisseur Carlos Palacios comanda el proyecto de la ópera federal y es el responsable de la obra Hanzel y Gretel que se verá este domingo próximo en el Teatro Sarmiento. Una obra integrada por 75 artistas (cuerpo de ballet, coro, solistas, músicos) no es fácil de llevar, sobre todo porque la ópera resulta compleja en sí misma. Hay que ensamblar lo mejor posible lo teatral, la interpretación lírica y musical, la puesta escénica hasta la entrada y terminación del espectáculo.
Comenzaron los ensayos previos al estreno y las sesiones se vuelven más intensas todavía cada hora. Muchos detalles por ajustar, pero lo importante, es que se trabaje en equipo.
DIARIO DE CUYO fue testigo exclusivo de la labor artística de esta producción realizada por el programa de ópera y danza federal del Ministerio de Cultura de la Nación, en conjunto con la Secretaría de Cultura de San Juan.
"Es importante el trabajo organizado día a día", cuenta Silvana Moreno, directora de Artes y Oficios, quien participa en la producción del espectáculo representando a la provincia. Los cantantes líricos, elegidos por audiciones realizadas en marzo, trabajan la técnica vocal, la teatralidad y la puesta en escena junto a Delia Torres-Massuh, la maestra pianista que conoce a la obra como la palma de su mano. "Me parece genial que se hagan audiciones en el lugar donde se haga la ópera. Es algo que normalmente en nuestro ambiente no ocurre. Hay varios roles para sopranos y como somos muchas, la elección fue reñida", dijo Sara Hidalgo, quien interpreta a la madre de los Hansel y Gretel. Mariel Santos, quien hace el papel de Gretel, viene del programa de canto de Verónica Cangemi de Mendoza: "Me parece algo necesario y genial este proyecto, porque hay muchos cantantes, pero faltan iniciativas culturales de este tipo. Se puede hacer ópera para el pueblo".
El carácter federal que tiene esta producción, es la característica más destacable, ya que el Coro de Niños y el Ballet de Niños, como lo es la Camerata, en su mayoría son artistas locales, luego están los solistas que vienen de Mendoza. La escenografía está hecha en Corrientes, otra parte de ella está hecha con materiales rescatados de la Fiesta del Sol; el decorado es de Rosario, el vestuario está compuesto con prendas de Santiago del Estero y confeccionadas en Tucumán; y otras realizadas en San Juan. Todo se entrelaza, esa es la idea.
Los cantantes deben tener muy en claro el texto, la música, el tiempo de actuación y la escena marcada por el régisseur. Aunque, en poco tiempo debe salir todo bien calibrado, la integridad humana es total entre los artistas. Hay solidaridad y buena convivencia. Algunos pueden tener ciertas cábalas previas a la salida del camarín, pero todos piensan en un solo objetivo, sacar el espectáculo a la máxima perfección. Para ello, Carlos Palacios les ayuda a tranquilizarse, a que pierdan el miedo a enfrentar al público y que estén confiados. "Quiero que los niños se inicien en la cultura lírica. Porque aquí, no hay micrófonos, las voces son trabajadas, hay una orquesta que musicaliza, es un espectáculo bello y completo. Sobre todo, que la gente de San Juan, pueda ver a sus artistas", explicó Palacios y agregó: "Sucede que todo llega enlatado de Buenos Aires. Vienen los famosos hacen su show y sólo queda en camarines, los algodones tirados en el piso. En cambio aquí queda enseñanza, experiencia, crecimiento para los artistas locales para que puedan ser profesionales". Y concluyó: "No hay que tenerle miedo a la ópera. No es necesario tener una carrera universitaria para entenderla. Es un arte donde se debe predisponer a sentirla".
Para Gustavo Plis, el director de la Camerata San Juan, "estamos ensamblando con los chicos, los cantantes, los bailarines y los músicos todos los días. Hay un evidente paso hacia adelante". Como no hay foso, la orquesta no está muy cómoda, pero suena y se luce pese al poco espacio y a la complejidad interpretativa que requiere la obra. "Tienen un entusiasmo grande porque confluyen muchas áreas. La Camerata está en condiciones de llevar adelante proyectos de este tipo".
La función estelar será este domingo 21 de junio a las 20 en el Teatro Sarmiento (localidades agotadas) y la segunda función será el lunes 22 a las 21,30. Las invitaciones gratuitas podrán retirarse por boletería del Teatro, en horario de 10 a 13 y de 18 a 21. Además, la Ópera dará una función en el Teatro Independencia de Mendoza, el día miércoles 24 de junio.