San Juan, 28 de julio.- En abril, Érica Lira, de 29 años, consiguió algunos datos precisos que nunca había tenido acerca de la identidad de su padre, a quien jamás conoció, y decidió buscarlo por Facebbok. Abrió una página que se llama “Busco A Mi PaPá (Soy Érica Lira)”.
“Hace unos días se comunicó un señor conmigo, Raul Meglioli. Sé de él que le gusta mucho internet, me dijo que conocía a mi tío, Hugo Lucero, y que iba a hacer algo por mi”.
Érica recién conoció estos datos hace unos meses: Hugo Lucero, su tío, el Ñato Lucero, su abuelo y Raúl Lucero, su padre. Sólo sabía que vivían en Barrio San Martín (donde también vivió Meglioli y del que se mudó hace años), y que eran taxistas que en el año 1979 paraban en calle mitre, frente a la plaza 25 de Mayo. También tenía la información de que su madre, Mónica Lira conoció a su padre cuando trabajaban juntos, en el año 1979, en la Distribuidora Montilla, en Brasil y Tucumán.
“Meglioli me comunicó con la viuda de mi tío. Mi marido habló con ella, muy bien, y supe que tengo dos primos hermanos”, dijo. Pero su “nueva” tía no tenía más datos que los una prima hermana del padre de Érica, sanjuanina, con quien la comunicó. “Esta mujer me dijo que no sabía nada, pero que tenía el teléfono de otra prima, y anoche la localicé”, señaló.
El círculo se iba cerrando. Esta prima, al fin, le dio el teléfono de su padre, Raúl Lucero, que vive en San Luis, y que desconocía la existencia de su hija. “Me comuniqué con él. Fue una conversación extraña, 15 minutos. No me negó nada. Fue una mezcla de emociones, palabras, llantos, muchas emociones. Fijate que ni le pregunté a que se dedicaba”, relató Erica.
Hoy sabe que tiene dos hermanos, hijos de Raúl, “el mayor de 20, el otro no sé”, contó. “Quedamos en volver a comunicarnos hoy, y arreglaremos cuando vernos. Tengo muchas ganas de conocerlos, te imaginarás”, dice, emocionada.
“Esta prima me pasó unas fotos donde está mi para y sus hijos, a los 8 o 9 años. Ahora entiendo a quien me parezco, ya que de mi familia materna no tengo rasgos, ni gestos”, explicó Erica.
“La relación con mi mamá es buena, pero claro, hay heridas que deberán ir cerrando. Ella dice que la entienda, que no la juzgue, pero yo aun no puedo. Decidió tenerme de soltera. Mi papá tenía 18 años cuando me engendró, y a los 23 se fue a San Luis, y jamás supo de mí. Nadie de la familia de él o de la de mi mamá supo nada. Mi mamá no contó nada a nadie, y cuando yo le preguntaba me daba información confusa”, recordó Erica.
Anoche internet hizo un pequeño milagro de tiempos modernos. Permitió que una hija recuperara un padre, y que un padre tenga una hija, y dos nietos. Érica cerró la charla con DIARIO DE CUYO online confiando que “el se emocionó mucho al saber que tiene nietos, Nicolás de 9 años, Bautista, de 2 y Agustín, de 7 meses, y los quiere conocer. Es una maravillosa historia, y estoy feliz”.
