El líder libio Muamar Kadafi seguía desafiando el jueves a los rebeldes y a la comunidad internacional desde algún refugio y volvió a hacer un llamado a sus seguidores para que marchen a Trípoli y ‘purifiquen‘ a la capital tomada por los rebeldes, a quienes catalogó de ‘ratas, cruzados e infieles‘.

En el audio de un corto discurso transmitido por los canales de televisión leales a su Gobierno, Kadafi exhortó a
las tribus de todo el país a luchar y expulsar de Libia a los agentes extranjeros.

“Libia es para los libios y no para los agentes, no para el imperialismo, no para Francia, no para Sarkozy, no para Italia”, destacó el veterano líder.

“Trípoli es de ustedes, no de aquellos que dependen de la OTAN”, agregó el coronel.

Los rebeldes tomaron el control de Trípoli esta semana e ingresaron al complejo de Kadafi, cuyo paradero permanece siendo un misterio.

En una referencia a un discurso que dio en el inicio de las revueltas contra sus cuatro décadas en el poder, Kadafi urgió a los jóvenes libios y a los líderes tribales a tomar el control de las regiones de manos de los insurgentes para luego marchar hacia la capital.

“Calle por calle, casa por casa”, dijo Kadafi. “Las tribus que están en las afueras de Trípoli deben marchar a Trípoli. Cada tribu debe controlar su área e impedir que el enemigo asiente sus pues en esta tierra pura”.

“Jeques de las mezquitas, escolares, inciten a la gente a la jihad (guerra santa), mátenlos, derrótenlos pronto. Ustedes son la inmensa mayoría (…) No habrá lugar seguro para los enemigos”, agregó.

Los milicianos libios en Trípoli tratan
de mantener la presión sobre las fuerzas kadafistas, sólo organizadas aparentemente al sur de la capital, y han logrado unir sus esfuerzos con los combatientes del frente occidental de Misrata, según pudo comprobar Efe.

Un convoy con revolucionarios de la ciudad de Misrata, que durante seis meses fue el mayor enclave rebelde que resistió al cerco de los brigadistas del régimen, entró por el centro de la ciudad, y según explicaron varios milicianos, ahora se dirigirán al sur del aeropuerto, en dirección a Garián.

Los combates de las últimas horas tuvieron lugar en torno al aeródromo de la capital libia donde la guarnición, no se sabe si comandada por Hamis, el hijo al que Kadafi encomendó sofocar la rebelión armada, sigue al frente de las tropas kadafistas.
Uno de los milicianos, natural de Garián, 100 Km al sur de Trípoli, admitió que en esa zona han encontrado una resistencia encarnizada, y que los kadafistas lograron detener su avance con un carro T-62, de fabricación soviética, enclavado en un cruce de caminos. De todos modos, son optimistas sobre el resultado final de la contienda.