La producción mundial de vino no ha cambiado mucho en tiempos recientes.
En los últimos 25 años ha fluctuado entre 260 y 290 millones de hectolitros. Sin embargo, mientras los principales productores europeos han reducido su producción un 9% desde 1991-95, los principales "nuevos productores" la incrementaron en un 27%, y ésta puede ser la tendencia en el futuro si la producción en Europa no se adapta a las tendencias de mercado.
La superficie mundial de viñedo ha disminuido un 7% desde el principio de los 90’s hasta 7.5 millones de hectáreas, con los principales productores europeos perdiendo 825.000 hectáreas (-22%), mientras los "nuevos productores"la incrementaban en 303.000 hectáreas (36%).
Se vislumbra una tendencia en el futuro si la producción, junto con la comercialización no se profesionalizan más en los próximos años.
La creciente bipolarización entre: a) Un consumo muy extendido de vinos relativamente sencillos, frescos y ligeramente más dulces, a precios económicos, principalmente vendidos a través de la gran distribución,embotellados cada vez más en los mercados de destino tras haber viajado en muchos casos a granel, tanto por razones de tipo económico como medioambiental; y b) Un segmento menor de vinos premium, embotellados, a precios relativamente más altos,muy introducidos en hostelería, tiendas especializadas y para ocasiones y regalos.
A nivel mundial, más lentamente que hace años, la proporción de exportaciones sobre consumo total sigue aumentando.
En 2015 creció con fuerza el valor y precios medios del vino exportado, que parece se ha estabilizado en el 2016.
En 2015,los tres grandes exportadores mundiales muestran una clásica curva de demanda,con el resto de productores entre los 2 y los 4 euros por litro (salvo Nueva Zelanda) y por debajo de los 10 millones de hectolitros.
En los últimos 16 años, Nueva Zelanda ha crecido extraordinariamente a partir de bases pequeñas, como también lo han hecho Chile y Argentina.
Italia, España y en menor medida Francia, están llamados a vender al exterior.
Pero es España quien está marcando las diferencias en volumen estos últimos años. En 2014 y 2015 ha evolucionado de forma diferente porque tiene carteras distintas, aunque los precios son consecuencia de 2 factores: una cartera de productos con más cantidad de los de menor precio; precios inferiores en las diferentes categorías.
En cuanto a la cartera, España tiene un 57,5% de granel frente al 16% de Francia, mucho menos espumoso que Francia e Italia y una proporción muy inferior de vinos envasados.
Entre los vinos en envases hasta 2 litros (20.300 millones de euros en un total de casi 28.500), España es el tercer exportador mundial con menos de la mitad de la facturación de Italia y una tercera parte de la de Francia, aunque con mayor crecimiento medio que Francia en los últimos 16 años.
En volumen, Italia lidera la clasificación, seguida de Francia y España con 12, 10 y 8 millones de hectolitros respectivamente, pero el crecimiento medio reciente es mayor el de España.
También en el caso de envasados, Francia junto con los EEUU lidera la clasificación de precios medios en 2015, alrededor de los 5 euros por litro, mientras Australia, Italia y Chile mejoran sus posiciones y los precios medios españoles marcan la base.
El caso español
España apuesta por el consumo nacional pero, por el momento, las mayores posibilidades siguen en exportación.Debe eliminar excedentes y con una caída de su consumo interno, no tiene otra salida.
A tenido un buen crecimiento del valor desde 2009 ahora frenándose. Hoy es el primer exportador mundial en volumen del mundo. Las exportaciones de España son de 3.037 millones de litros e ingresan 2.953 millones de euros (hace 20 años solo exportaba 800 millones de euros).
Un dato importante es que a granel vende 1.396 millones de litros, lo que representa el 46 % del total de vinos que exporta, recibiendo 503,6 millones de euros ( el 17 % de su facturación total).
Recientemente en el World Bulk Wine Exhibition, la única feria internacional de este tipo de vino que se celebró en Holanda y al cual el gobierno de Uñac asistió con 12 bodegas sanjuaninas, el 85 % del vino a granel que se vende en el mundo se dio cita en dicha feria. Un negocio que genera en volumen más de 23.500 millones de euros al año y en el que España tiene mucho que decir.
En esa feria se oyó hablar mucho español, ya que participó con más de 60 empresas. Los graneles representan el 38 % del volumen del mercado del vino mundial pero no todos los graneles son iguales. El crecimiento en graneles no ha sido acompañado de una suba de precios ya que sigue exportando a bajo valor.
