Buenos Aires, 12 de agosto.- "Cuando la gente oye acerca de cuestiones como las conjunciones de planetas cree que va a pasar algo malo, pero en realidad es apenas un fenómeno visual muy bonito de observar", explicó a El País el profesor Enrique Escuder, uno de los especialistas del Planetario de Montevideo. El viernes a la noche se realizará allí una sesión especial de observación del acontecimiento, junto a la Asociación de Aficionados a la Astronomía.
El experto recalca que el concepto del fenómeno es el de "conjunción" y no el de "alineación", algo que dice que se ha repetido bastante en estos días. "Si fuera una alineación, los planetas se eclipsarían y no se podrían ver los cuatro", afirmó.
En definitiva, entre hoy y mañana podrán ser observados cuatro de los cinco planetas visibles a simple vista en el firmamento (Venus, Marte, Saturno y Mercurio) en posiciones relativamente cercanas y con la Luna en fase creciente atravesando la región.
Según Escuder, este tipo de conjunciones no se da a menudo aunque sí cada tanto, con características particulares en cada ocasión. "Son fenómenos interesantes porque permiten responder a cuestiones como qué tipo de velocidad tienen los planetas. Cuando están más cerca del sol, aumentan su velocidad, algo que descubrió Kepler en los tiempos de Galileo Galilei. La característica visual de los planetas es que no titilan, a diferencia de las estrellas".
Para que un fenómeno de este tipo sea denominado como "conjunción", tienen que intervenir dos o más planetas. Hoy, cuando el sol se oculte hacia occidente, Venus -el tercer objeto más brillante del cielo- ya podrá observarse.
"Será además el momento en que Venus tendrá su grado de magnitud más importante. Luego se verá a Marte y a Saturno con muy poco brillo. Y en la parte inferior, más cerca del horizonte, estará Mercurio", explicó el profesor.
Meteoritos. Cerca del horizonte, también se avistará una lluvia de meteoritos -conocida como lluvia de Perseidas- en forma de estrellas fugaces. Cada año, al realizar la traslación alrededor del Sol, la Tierra pasa por una zona con fragmentos rocosos que arroja el cometa periódico 109P/Swift-Tuttle. Estos fragmentos, los meteroides -que son dejados por cualquier cometa en órbita alrededor del Sol- forman regiones anulares. Cuando la Tierra entra en una de estas regiones, su campo gravitatorio atrapa algunos de estos meteroides, que entran a gran velocidad en la atmósfera y forman la lluvia.
El fenómeno de la próxima madrugada recibe el nombre de Perseidas ya que el origen de esta lluvia de meteoros se ubica en la constelación de Perseo.
