Uno de los grandes problemas de los dispositivos móviles es la corta duración de sus baterías, junto con el tiempo de carga relativamente lento, en comparación con su capacidad. Una pequeña startup israelí estaría muy cerca de encontrar una solución a este problema, gracias a una tecnología que vienen desarrollando desde hace años y que ahora han mostrado por primera vez en acción. En concreto, la empresa se llama StoreDot y fue fundada en 2012 por el científico Doron Myersdorf, junto a otros investigadores. StoreDot se dedica principalmente a buscarle aplicaciones prácticas en el mundo de la tecnología a lo que bautizaron con el nombre de "nanodots biológicos", que de manera muy resumida son unas nanoestructuras formadas a base de compuestos orgánicos y cuentan con propiedades clásicas de los semiconductores pero que son mucho más pequeños y eficientes que éstos. Las posibles aplicaciones de los mencionados nuevos nanodots en el mundo tecnológico son muchas y variadas, y entre ellas se encuentra una batería formada con este nuevo material, que al ser un compuesto biológico es mucho más respetuoso con el medioambiente. Durante el simposio Think Next de Microsoft, que ha abierto sus puertas en las últimas horas, se han presentado estas baterías que se recargan en tan sólo 30 segundos y soportan miles de ciclos de carga/descarga. Obviamente se trata de un prototipo y aún les falta superar varios retos para que sea comercialmente viable. Entre ellos está reducir su tamaño ya que el prototipo es más grande que los smartphones actuales. Por otro lado, deben conseguir aumentar su capacidad a un rango aceptable (2000 miliamperio-hora mínimo). La startup cree que a finales de 2016 habrá superado ambos inconvenientes, para comenzar a pensar en su producción en masa
Fuente: TICbeat.com