En la era de las computadoras y la tecnología, el ciclismo argentino sigue sufriendo males propios de las improvisaciones. Ayer en el velódromo de San Luis, la dupla integrada por Emanuel Saldaño y Gerardo Fernández ganó la competencia de la Americana sobre la de Metropolitana, compuesta por Sebastián Donadio y Sebastián Cancio. Pero una protesta de los segundos, más un error de los comisarios, terminó con un oro compartido, ya que ambos equipos fueron declarados ganadores.
Los sanjuaninos se impusieron por 35 a 33 puntos, ganando el último embalaje "El Chino" con más de 30 metros sobre Donadio. Ese último embalaje fue el que desató la tormenta. Mientras los sanjuaninos festejaban, Donadio y Cancio protestaban que habían girado una vuelta más, que en vez de hacer 200 vueltas habían corrido 201.
Lo cierto es que la campana sonó indicando la última vuelta con Donadio de cabeza de carrera, pero en los últimos 250 metros (porque la campana indica el último giro) Saldaño lo pasó como un poste y lo dejó mirándole de lejos el número 5 de su dorsal.
La bandera declaró ganadores a los sanjuaninos, de ahí en más se sucedió una serie de dimes y diretes (ver página 69) que luego de dos horas de deliberaciones, culminó con la decisión salomónica del cuerpo de comisarios de declarar campeones a ambas parejas.
Por donde se lo mire, un papelón. Una mancha a un torneo que ha mostrado grandes figuras y brillantes ciclistas. Una determinación que lo único que hace es dejar más en evidencia los gruesos errores que cometen los comisarios. Esos que, lamentablemente, se suceden más a menudo en este tipo de certamenes.
¡Ojo! Que no se entienda mal. Los reglamentos están para ser cumplidos y los deportistas, en este caso Donadio y Cancio están en todo su derecho de protestar lo que consideren injusto y que los perjudica. Lo mismo para los sanjuaninos que en este tema, si hay que buscar culpables son los que menos culpas tienen.
Con esta determinación el Colegio de comisarios aceptó un craso error que echó por tierra la ilusión de ambos equipos. Quienes ahora deberán compartir un título porque un grupo de señores que están -preparados- para dictar justicia, no tuvieron la grandeza de tomar una determinación y después, aceptar las consecuencias.
Ahora San Juan que podría haber quedado al frente del medallero del campeonato quedó detrás de Metropolitana que con el Oro que recibió compartido lo supera.
LA CARRERA
El espectáculo que dieron en el velódromo puntano los equipos que participaron de la Americana fue de altísimo nivel. Varios equipos pugnaron por una victoria y sobresalieron San Juan y Metropolitana porque el rendimiento de sus hombres fue superior. Con la diferencia que mientras Saldaño y Fernández corrían solos, a Donadio y Cancio los ayudaban Pueblo de la Paz (allí corre Ercilla, alumno de Donadio en su escuela) y los del Norte de la Pampa, que fueron descalificados por tirar durante tres vueltas a la dupla porteña, cuando no debían hacerlo porque habían perdido un giro.
Esas cosas y otras como la de haberlo hecho ingresar a Donadio en la cabeza de la carrera luego que Cancio sufriese una caída cuando estaba a "media agua" entre los sanjuaninos y el pelotón empañaron una carrera ganada brillantemente por dos muchachos que tenían sangre en el ojo porque en este torneo las cosas no les habían salido como pretendían.