Lejos quedaron los bailes de egresados formales donde la cena y la vestimenta elegante eran las estrellas de la noche. Ahora, el protagonismo se lo lleva el baile y la diversión que continúa aún después de finalizado el evento. Tres wedding planners de la provincia hablaron sobre esta nueva tendencia impuesta por los mismos graduados.

Hasta hace un par de años la cena del baile de egresados duraba aproximadamente dos horas y media. Actualmente, no supera los 60 minutos. El menú que incluia entrada, primer y segundo plato quedó desterrado por el copetín.

‘Los chicos piden sánguches, pizzas, tacos o empanadas, todo lo que se pueda comer rápido. Incluso hay egresados que piden que el menú no incluya postre más que la torta. Además, para la madrugada también piden platos que pueden comer sin dejar de bailar como sanguchitos o bocaditos’, dijo Augusta Jaled.

Además del baile extendido, algunos egresados también han incorporado nuevas costumbres para divertirse. María José Echegaray, otra organizadora de eventos sociales, dijo que ahora los chicos se ubican todos juntos en una misma mesa larga y no en mesas individuales junto a sus familias o en living. El fundamento: tener una fiesta desestructurada.

Y si de romper la informalidad y de extremar la diversión se trata, los chicos han incorporado nuevas opciones. A los sketch que ellos mismos protagonizan (foto) o a la entrega de diplomas al más ‘botón’ o al más "chanta’, sumaron las fiestas temáticas.

Florencia Grígolo este año egresa del colegio María Auxiliadora y con sus compañeras eligieron la temática de Halloween para el baile de egresados, que será el 22 de diciembre. "La idea es hacer algo distinto y divertido. La vestimenta, la decoración y el cotillón serán referidos a este tema. A muchos padres puede no gustarle la idea, pero deben entender que la fiesta es nuestra y que la planificamos para pasarla la mejor posible’, dijo la joven.

José Martín, wedding planner, dijo que para el mes que viene ha organizado dos bailes de egresados con fiestas temáticas, una de noches de brujas y otra mexicana donde el menú principal será tacos y enchiladas, y la decoración con colores vivos. También habló sobre la nueva tendencia de los graduados de continuar la fiesta aún hasta la tarde noche del día siguiente. Dijo que muchos egresados acostumbran a alquilar un colectivo para, ni bien salen de baile, trasladarse a alguna finca para seguir con la diversión durante todo el día. Y que por eso los organizadores toman algunos recaudos para evitar fatalidades.

‘Cuando me contratan le hago firmar a los padres un contrato donde queda especificada que ningún chico se retira del baile sin la compañía de un adulto y sin antes tomar una taza de chocolate caliente con una factura para disminuir el efecto del alcohol. No quiero decir que los chicos tomen sin control, sino que pueden no estar acostumbrados a ingerir bebidas alcohólicas y sentirse mal con sólo una copa’, dijo Martín.

Pese a todas las novedades que se fueron incorporando en la organización de bailes egresados, los tres organizadores de eventos consultados coincidieron en que hay dos tradiciones que los graduados mantienen: bailar el vals con sus padres y hacer el evento en un salón cerrado para que ni las inclemencias del tiempo arruinen la fiesta.