No fue un gran golpe, pero sí insólito y hasta escandaloso. Es que robaron 2.000 pesos en mercadería de un kiosco de la mismísima Plaza 25 de Mayo, en pleno centro. Lo peor de todo fue que los ladrones fueron filmados en plena acción por una cámara de seguridad ubicada a 8 metros de distancia y, supuestamente, los policías de la Central encargados del monitoreo ni se dieron por enterado de lo que pasaba.
El robo fue descubierto ayer a las 9 de la mañana por los propios dueños de ese pequeño negocio de la esquina de Mitre y General Acha. Fuentes policiales revelaron que al tomar conocimiento del hecho, en la Sala de Video de la Central revisaron las grabaciones de la cámara apostada justo en esa esquina y fue ahí que vieron que el robo había sido grabado. Un alto jefe policial comentó que en las imágenes se observa a dos jóvenes forzando la puerta del kiosco alrededor de las 4 de la madrugada y que estuvieron como 10 minutos en el lugar. Eso desató la bronca de la cúpula policial, ya que los que estaban encargados de controlar y monitorear las cámaras de seguridad en ese horario aparentemente ni se habían percatado de lo que sucedía o estaban distraídos, dijeron las fuentes. Si se hubieran dado cuenta de lo que pasaba, podrían haber mandado policías para evitar el robo y quizás atrapaban a los ladrones, explicaron. Por eso mismo ayer se dispuso iniciar sumarios administrativos al personal que se encontraba de guardia en ese sector. Esto mismo ya pasó en septiembre último por un caso similar tras el robo a San Juan Informática (ver recuadro).
Miriam Hernández de Díaz, la dueña del kiosco, dijo "estamos en pleno centro y no tenemos seguridad de nada. Hace 20 años que tenemos el kiosco y no es la primera vez que nos roban". Estaba indignada, porque se supone que es un lugar transitado y hay policías haciendo recorridas en esa zona por los comercios, bancos y los edificios como la Catedral, el teatro y la sede de la Regional Cuyo de la Policía Federal. Además, enfrente funciona una confitería que está abierta toda la noche.
Los ladrones no anduvieron con vueltas, ya que utilizaron una barreta -la dejaron tirada- para violentar las puerta del local y así vencieron los dos candados. A todo esto, la cámara situada a no más de 8 metros de ahí, los filmaba, según datos policiales. Los delincuentes revolvieron el kiosco y se llevaron decenas de paquetes de cigarrillos, por un valor de 1.000 pesos, comentó Miriam Hernández. También sacaron 50 pesos que tenían para sencillo, cajas de encendedores, galletas, golosinas y otras cosas, por un monto de otros 1.000 pesos, aseguró. Anoche, la policía hacía allanamientos en busca de uno de los sospechosos que aparentemente fue identificado a través de la grabación de la cámara de seguridad.
