Las filtraciones de techos y, derivado, las instalaciones eléctricas mojadas fueron la problemática más frecuente que reportaron los directivos de los más de 500 establecimientos escolares que alojan a más de 700 escuelas de San Juan, tras las lluvias de martes y miércoles que provocaron un verdadero caos en la provincia. Fue por eso, y basados en una medida de prevención, que el Ministerio de Educación suspendió las clases ayer en las escuelas de gestión estatal, por segundo día consecutivo.

Aunque se especulaba con que las clases iban a seguir suspendidas hoy, Educación comunicó anoche que el dictado de clases volvía a la normalidad hoy en todos los edificios.

El Ministerio no recuerda una suspensión por coletazos de una lluvia, ya que los temporales graves generalmente se registraron fuera de los ciclos lectivos. Si bien no precisaron la cantidad de escuelas con inconvenientes, informaron que el problema recurrente que figuraba en los informes que enviaron los directivos era de filtraciones, que afectaron a aulas y galerías y que humedecieron las instalaciones eléctricas. Este peligro latente de electrificación fue lo que derivó en la suspensión de clases en las escuelas de gestión estatal.

Además fueron reportados otros problemas, como sectores internos inundados o dificultad de acceso por el anegamiento de calles circundantes.

“La medida de suspender las clases se tomó a modo preventivo y para evaluar el estado de cada establecimiento. En el relevamiento trabajaron los directores y personal de limpieza, inspectores del ministerio, del Obrador e incluso de los municipios. Una vez detectados los problemas, los empezamos a solucionar”, explicó Renzo Rizetto, coordinador de Infraestructura de Educación.

En la escuela Alas Argentinas, un equipo de técnicos evaluaba ayer incluso reemplazar tramos de cañería y llaves térmicas; en la 11 de Septiembre, la humedad provocaba que saltara el disyuntor y por consiguiente no funcionaba la bomba de agua; mientras que en la EPET 3 las porteras sacaban el líquido que había ingresado al primer piso.

Las escuelas Sarmiento y Balcarce también sufrieron la humedad de sus instalaciones eléctricas, pero además, la lluvia y el granizo rompieron las techos de media sombra del patio y le dieron una estocada a las dañadas cornisas de aulas y galerías.