El seleccionado de Francia se coronó campeón de Europeo, tras derrotar en la final que se disputó en Sofía, capital de Bulgaria, por 3-0 a la sorprendente Eslovenia, en un partido con parciales muy ajustados: 25-19, 29-27 y 29-27.
En tanto, en el partido por el tercer puesto Italia derrotó por 3-1 a Bulgaria, con parciales 25-20, 25-14, 23-25 y 25-20.
