Santiago, 17 de enero – La segunda vuelta presidencial en Chile se desarrolló hoy sin incidentes, con una menor concurrencia de votantes que la esperada hacia el mediodía, y con la confianza de candidatos y dirigentes de cada sector que se pronunciaron durante la mañana sin dar cuenta de la veda vigente.
Desde la 7 de la mañana las más de 34 mil mesas comenzaron a instalarse en los locales de votación de todo el país -con algunas demoras que llevaron a la total normalización a las 9- para recibir el voto de más de 8,2 millones de chilenos.
Se espera que para la 19, o incluso antes, ya se den los primeros cómputos oficiales, ya que las mesas que abrieron a las 7 comenzaron a cerrar a las 16 y así irá ocurriendo con las restantes mesas hasta las 18, de acuerdo a la legislación vigente.
La jornada está marcada por el calor que se espera supere los 30 grados en las primeras horas de la tarde, y por el intenso movimiento de viajantes en las rutas y en las terminales de ómnibus, en particular desde los balnearios del Pacífico, debido a que el acto eleccionario se produce en plenas vacaciones estivales.
El nivel de excusación es uno de los principales puntos a analizar en el resultado de hoy, tras el voto de 7,2 millones de personas en primera vuelta, así como los porcentajes de anulación y en blanco.
El candidato de la Concertación, Eduardo Frei, o el de la Alianza por el Cambio, Sebastián Piñera, compiten hoy para suceder a Michelle Bachelet en el sillón de La Moneda, en comicios que se presentan con aparente paridad según la sensación que reina en ambos comandos y a la luz de la última encuesta difundida el miércoles.
El candidato de la Alianza por el Cambio fue el primero en votar a las 9.40 y desde el Liceo Cervantes del centro de Santiago hizo un llamado a la unidad de todos los chilenos tras lo que consideró será ‘un gran triunfo‘ de su coalición.
El millonario Piñera votó acompañado por su esposa Cecilia Morel y sus dos hijos Cristóbal y Sebastián, y vivado por decenas de militantes de su sector como ocurrió en plena campaña electoral, aseguró que ‘esta noche vamos a tener un gran triunfo pero lo vamos a celebrar como los demócratas, con alegría esperanza y unidad de todos los chilenos‘.
Pero también se dieron cita en el Colegio seguidores del candidato de la Concertación Eduardo Frei, quienes cruzaron verbalmente a los piñeristas, lo que obligó a la intervención de los carabineros.
Por su parte el candidato de la Concertación hizo lo propio lejos de Santiago, en la comuna de La Unión de la Región de los Lagos, donde acompañado por su esposa Marta Larraechea, volvió a vincular a quienes rodean al candidato de derecha con la dictadura de Augusto Pinochet.
‘Nos han hablado mucho de los cambios. ¿Cambio hacia qué? Dijeron que ahora les tocaba a ellos. Ellos estuvieron 17 años y los chilenos pueden comparar libremente‘, dijo el candidato tras emitir su voto al prometer ‘un país para todos y no para algunos. Un país más equilibrado, con mayor futuro, sin arrogancia y sin soberbia‘.
‘Voy a ser su sucesor por voluntad popular. Represento lo más profundo de nuestro pueblo y el alma de Chile. Haremos un gobierno para todos y no para unos pocos‘, insistió el ex presidente concertacionista.
La presidenta Michelle Bachelet, tras votar en una escuela de la Comuna de Las Condes, reiteró hoy su convicción de que la elección de hoy será ‘muy competitiva‘ y aseguró que saludará al candidato vencedor tal como marca la tradición democrática en Chile.
Por la tarde, a partir de las 17 o 18, se espera que los candidatos lleguen a sus comandos instalados en dos hoteles del centro de Santiago, en los que montaron en las últimas horas sendos escenarios para realizar los festejos del triunfo, el cual resultará esquivo para alguno de los dos.