Unos minutos antes de la 1 de la tarde dejaron de vender entradas. En menos de una hora tras abrir el predio alcanzaron la capacidad máxima de 2.000 personas que tiene el comedor de la Fiesta de la Punta de Espalda. De esa manera, la convocatoria fue un espaldarazo a las expectativas que tenían los organizadores, que en la primera jornada alcanzaron el lleno total. Hoy, a las 12 y en la ex Estación Belgrano, cerrarán el festival que nació para promover este corte vacuno típicamente sanjuanino y que, por el éxito alcanzado, quieren que sea un evento anual.

Nunca antes se había realizado una fiesta de este tipo y la gente respondió al convite, por demás pintoresco porque había cuatro variedades de punta de espalda. Así, la fosa circular que tiene un vagón de tren, fue el lugar elegido para asar y cocinar las 500 puntas de espaldas previstas para el primer día (hoy habrá otras 500, para totalizar unas dos toneladas y media de carne durante todo el festival). Allí había ocho parrillas para la variedad de asado a las brasas, mientras que alrededor, más de 40 pinches doraban las puntas de espalda a la llama. En tanto, en el sector medio colocaron tres grandes círculos en los que cocinaron la carne al disco, mezclada con verduras. A su vez, la cuarta variedad, la punta de espalda al horno, la hicieron en el sector posterior de la carpa cocina.

“Éramos optimistas en tener una buena convocatoria pero nos sorprendió alcanzar el lleno en tan poco tiempo. Esto nos emociona y nos da la razón de que la propuesta gastronómica era la acertada, que era algo que la gente necesitaba. Y de paso, nos da el respaldo para hacer de la Fiesta de la Punta de Espalda un evento que se repita todos los años”, expresó Germán Leuzzi, uno de los seis organizadores que tuvo la iniciativa, todos vinculados al rubro gastronómico.

Hubo largas filas de comensales que, una vez dentro del predio, elegían la variedad de plato y debían pagarla, para luego sí acceder al comedor. A su vez, el desfile del público ante el sector de cocina, que llamaron fogón campero, fue constante. Todos con cámaras y celulares y tomándose selfies con las puntas de espalda asándose, de fondo. Pese al intenso sol y una jornada calurosa, nadie quiso perderse esa postal. Hoy, desde las 7, nuevamente encenderán el fuego, para darle paso a la última jornada de la fiesta.