Fútbol informal y en espacios reducidos y trabajos de fuerza fue la inversión del seleccionado argentino en el segundo día de preparación de cara al Mundial de Brasil, con la única ausencia del volante Angel Di María, quien llegó esta mañana al país y pasará unos días de descanso en su Rosario natal.
Aunque el trabajo fue a puertas cerradas, se pudo ver desde el exterior del predio aledaño a la autopista Riccheri las tareas en campo. Fernando Gago y Ever Banega, que ya tenían el alta médico, el primero por una distensión y otro por una pulmonía, se movieron sin inconvenientes, en tanto Augusto Fernández salió al campo a moverse con cuidado en el marco del tratamiento apurado para intentar sortear el esguince de rodilla que puede ser decisivo para la elección del entrenador.
No hubo estrategia en el entrenamiento distendido. Empezó el trabajo dividido con los tres arqueros a cargo de Juan José Romero, mientras en un costado Messi, Mascherano, Federico Fernández, Aguero, Basanta y Alvarez hacían un reducido ante Zabaleta, Demichelis, Maxi Rodríguez, Banega, Palacio y un sparring.
A un costado, otro grupo hacía trabajo de fuerza, a los que luego se fueron sumando los que dejaban el reducido.
Sobre el final de la práctica, hubo un diez contra diez. Por un lado, con camisetas blancas: Messi, Mascherano, Agüero Basanta, Otamendi, Sosa, Biglia, Federico Fernández y Ricky Alvarez, con Romero en el arco. En el otro, con pecheras jugaron Andújar como arquero, Zabaleta, Campagnaro, Banega, Garay, Demichelis, Higuaín, Rojo Gago, y un sparring.
El plantel quedará liberado y mañana deberán presentarse temprano para continuar con el entrenamiento a doble turno.
