El cordobés Martín Garrido se adjudicó la segunda Vuelta de San Juan de mountain bike. El ciclista que supo ser el primer argentino en obtener un triunfo dentro del ciclismo rutero profesional logró la victoria final apoyándose en el triunfo logrado el sábado por la tarde en la crono escalada. El juvenil sanjuanino Emanuel Castro y el bonaerense Miguel Hidalgo lo escoltaron. Los tres igualaron el puntaje final en 9 unidades y allí decidió el resultado del esfuerzo en solitario realizado el sábado en un ascenso contínuo de 4,6 kilómetros hasta una cantera de cal ubicada en el pedemonte del cordón de la denominada Sierra Chica de Zonda.

En damas triunfó Inés Gutiérrez, que como se preveía le sacó una distancia sideral en tiempo a sus rivales, la que por el formato de la carrera que se define por puntos no se nota en la clasificación final.

Sabido era que después de la grata sorpresa que significó el brillante desempeño sabatino del pibe Castro, en la etapa decisiva saldrían a atacarlo de entrada. Así fue como desde la bajada de bandera Franco Governatori y el bonaerense Miguel Hidalgo pusieron manos a las obra y sacaron una luz que se fue ampliando al transcurrir la carrera por senderos aledaños al lago del Dique de Ullum.

Asi fue que desde un vamos en los puestos de vanguardia se atomizaron los esfuerzos. A los ya citados punteros, los siguieron tirando juntos para alcanzarlos Martín Garrido y Juan Pablo Pereyra. Detrás Mauro Berrocal hacía ingentes esfuerzos para llevarlo a Castro quien, luego comentó no haberse sentido cómodo durante el transcurso de toda la carrera. Con Lucas Masman metido entre los que viajaban segundos y terceros se armó la puja por la clasificación general. Detrás, el malón donde cada grupo también corría "su Vuelta’, también se había desmembrado en mil pedazos. Si uno se paraba unos minutos en algunos de los muchos puntos a la vera de la ruta 14 desde donde podía seguirse la competencia se daba cuenta que entre Noelia Núñez y Carina Gregori tenían un mano a mano por la categoría Damas mayores. Que Rubén Palmes seguía raudamente lo que hacía Ricardo Buteler entre los Master C-2. O como trabajaban Marcelo García y Estaban Delatorre trabajaban juntos para imponerse en B1. Y también ver el sólido andar de Carlos Ortis y Mauricio Manzi que se adjudicaron la A-2 y B2, respectivamente.

En realidad fueron muchas carreras en una sola, las que el público disfrutó de manera efusiva alentando a cada ciclista que haciendo un esfuerzo mayúsculo trataba de encontrar cierta cadencia sobre un terreno demasiado blando. Y, entre esas, 239 historias personales, Martín Garrido podrá contar que agregó un eslabón más a su cadena de éxitos: La Vuelta a San Juan de MTB.