El tercer día de internación del gobernador José Luis Gioja en el área de Terapia Intensiva del Hospital Italiano transcurrió sin sobresaltos, con estudios clínicos, de laboratorio, asistencia respiratoria mecánica y con una nueva compactación en el abdomen (ya la habían hecho una en San Juan). Se trata de un procedimiento para contener la pared abdominal tras la aparición de una apertura de la herida quirúrgica de la última intervención que le hicieron la semana pasada, en la que extrajeron la cola del páncreas con tejido necrosado.
“Me informó el doctor Eduardo San Román que le habían juntado otra vez esa zona en la que tiene puntos nuevos y un drenaje, que se suma al otro que tiene en la vesícula por la punción que le practicaron y de la que se extrajo un líquido viscoso que podría sugerir la fiebre que estaba teniendo”, dijo Gastón Gioja a DIARIO DE CUYO.
El Gobernador continúa con sedantes, aunque en algunos momentos del día su aplicación es más intensa debido al trabajo del equipo médico en la zona abdominal, que dejó con dolor al mandatario local. No obstante, durante el mediodía y las primeras horas de la tarde, estuvo más despierto, motivo por el cual el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, lo visitó cerca de las 13.40, aunque no ingresó a su habitación y sólo habló con su familia para no ponerlo ansioso (ver aparte).
El sanjuanino permanece rodeado de su mujer Rosa y sus hijos Flavia y Gastón. En cuanto a Camilo y Franco, los otros hijos, partieron ayer por la tarde rumbo a Buenos Aires.
“Esta mañana, luego de 42 días, los médicos nos autorizaron a informarle algunas cosas, así que le conté que Cristina había reasumido hace unos días y los cambios que había realizado”, señaló Gastón, quien agregó que bromeó con su padre. “¿Sabes quién es el nuevo jefe de Gabinete?, le dije mientras me hacía gestos para que le tirara algo. Me quería hacer de rogar un poquito para hacerlo sufrir, pero ahí no más le dije que Capitanich es el nuevo Jefe de Gabinete y abrió sus ojos sorprendido”, comentó el hijo mayor del Gobernador que resaltó que lo vio con más color y mejor semblante.
La familia llega al hospital a primera hora de la mañana y sólo sale del cuarto de Gioja para almorzar. El lugar elegido es el el comedor del centro de salud y a veces se cruzan a algún café cercano o descansan en un departamento que alquilaron a la institución, que ofrece albergue a metros del edificio, para los parientes de los pacientes.
En el ingreso al Italiano, muchas personas que caminan por la calle Perón, del barrio de Almagro, se detienen ante la presencia de cámaras y periodistas que entrevistan a Gastón, que se convirtió en el vocero oficial, además del subsecretario de Información Pública, Luis Amín, quien permanecerá hasta este viernes en Capital Federal.
“Vine a hablar con el hijo de Gioja, para desearle suerte y que tenga mucha fe, que va a salir bien todo” manifestó Daniel, un socio del histórico hospital que será intervenido el próximo martes por un tumor maligno en el hígado y que manifestó “espero lo mejor para él, al igual que lo espero para mí”. Rosa, una anciana que buscó unos estudios de control, saludó de lejos y dedicó mensajes de mejoría para el mandatario sanjuanino. Inclusive un taxista se asomó por la ventana y preguntó a los presentes si venían a ver a Gioja.
Así las cosas, la presencia del Gobernador no pasa desapercibida para los transeúntes porteños, aunque en el cuarto piso es un paciente más de todos los que están en terapia intensiva.
Los Gioja transcurren el día a día, con cada nuevo estudio, a la espera de que la salud del Gobernador continúe evolucionando favorablemente y se pueda detectar la bacteria que estaría originando las febrículas, para así tratarla específicamente con el antibiótico indicado.
