Golpeado, torturado y asaltado. No podía ser peor la pesadilla que vivió ayer en la madrugada un anciano con mal de Parkinson que fue atacado mientras dormía por dos encapuchados que tomaron control de su casa por al menos media hora, lo dejaron maniatado en la cama y le robaron cerca de 20.000 pesos en efectivo. Lo increíble es que fue el tercer robo que sufre en apenas 10 meses y todos en la misma vivienda, a 100 metros de la comisaría de Concepción, Capital.
‘No se puede vivir así’, repetía Antonio Edmundo Díaz (82), quien ya sufrió otro brutal asalto el 26 de diciembre pasado dentro de su casa en calle Tucumán, casi Cereceto. Aquella vez le robaron 25.000 pesos y fue un ataque casi calcado al de ayer a las 3 de la madrugada con dos hombres encapuchados que entraron por el fondo de su taller. Un mes antes, en noviembre, le habían robado 56.000 pesos de su negocio cuando no estaba.
En esta última ocasión, los ladrones entraron por atrás y llegaron a un patio interno para abrir una ventana corrediza del comedor. Díaz no alcanzó a levantarse de la cama que los ladrones entraron a su dormitorio y lo tomaron a golpes. ‘Me hicieron tira. Me pegaban en la cara y me pasaban el cuchillo por el cuerpo. Me pedían plata. Y yo les decía que se llevaran la plata, el televisor y lo que sea, pero que no me hicieran más nada. Dios se compadeció de mí, o si no me mataban’, relató el abuelo, que vive solo y tiene un negocio de venta y reparación de bombas de agua. Él no lo cuenta, pero su hija Aurora describió que le pasaban el filo del cuchillo por las piernas ‘como si fuera una gillette’ para que entregara más dinero. Llegaron a romper el colchón de su cama en busca de la plata. También revisaron los muebles, así se apoderaron de 15.000 pesos que eran de un cliente y otros 4.800 que eran suyos, según Díaz, quien aseguró que sólo se llevaron eso. Después lo dejaron en la cama, con los pies y las manos atadas con sábanas. Ahí estuvo alrededor de una hora y media hasta que se tiró al piso, se arrastró y alcanzó a tomar su celular para pedir ayuda.