Grecia, 29 de junio.- Jubilados furiosos en las puertas de los bancos cerrados. El anuncio de que el transporte público será gratis. Y el límite de 60 euros diarios en los cajeros, que recién funcionaron al mediodía. Así comenzó hoy, la era del corralito en Grecia.
El transporte público será gratuito en Atenas durante una semana para aliviar las dificultades provocadas por el cierre de los bancos y la gran demanda de carburante, anunció el ministro de Transporte, Christos Spirtzis. La iniciativa se mantendrá hasta el martes 7 de julio, día en el que los bancos deberían volver a abrir sus puertas.
A la vez, los conductores hacían cola frente a las estaciones de servicio, donde la venta de combustible aumentó un 20% respecto a la semana pasada. “Hay suficiente combustible. La vida de los turistas no se verá perturbada", aseguró el ministerio de Economía y Turismo, frente a los temores de que la crisis golpee a la industria turística.
Mientras que, en algunos bancos, los jubilados esperaban recibir información sobre el cobro de sus pensiones que, según el decreto, están exceptuadas de estas limitaciones. Sin embargo, recibieron la información de que hasta la tarde no se publicarán las sucursales que abrirán con la única tarea de pagarles.
