Señor director:
Creo que mucha gente no sabe que significa la palabra ‘nepotismo’’. El diccionario la define así: ‘Trato de favor hacia familiares o amigos, a los que se otorgan cargos o empleos públicos por el mero hecho de serlo, sin tener en cuenta otros méritos. ‘Cada vez se persiguen más activamente los casos de tráfico de influencias, nepotismo y otras formas de corrupción política’’.

Sin lugar a dudas, esto ocurre muy a menudo en nuestro país. Hasta me animaría a decir que es como una enfermedad tan cotidiana, que se toma como normal algo vergonzoso y reñido con la ética.
El diputado Guillermo Castello, de Buenos Aires, ha presentado un proyecto de ley para que se prohíba esta práctica maliciosa. Qué bueno sería que este proyecto se transforme en ley. 
Es la oportunidad de la nueva dirigencia política que demuestre a la ciudadanía que se está en el camino correcto hacia un cambio.

Toda la ciudadanía debería apoyar este proyeto a través de mensajes en las redes sociales. Exijamos terminar con la ‘dedocracia’’. Es necesario que los legisladores y funcionarios oigan la voz del pueblo.
Espero que este pedido se escuche como un clamor de toda la ciudadanía y seguro que así transitaremos por la democracia que nos merecemos.