San Juan 11 de abril.- Por primera vez desde que se dio a conocer el caso de violencia sobre Camila Brusotti en octubre del año pasado, su mamá, Alejandra Ríos, dio su versión de los hechos, respondiendo a las declaraciones de días atrás de Pedro Oris, quien manifestó que Ríos la golpeó con una asadera a Camila.

Antes de comenzar con el relato de los hechos ocurridos el día que Camilla fue internada, Alejandra Ríos trató de zafar de las acusaciones que pesan en su contra aduciendo que Oris la maltrataba.

Ríos está siendo investigada también por los hechos que le ocurrieron a la pequeña, ya que en la Justicia se sospecha que, al menos, encubrió lo que Oris hacía con su hija. Y también sospechan que ella mintió al confirmar la versión de Oris ante la Justicia, sobre que Camila se había caído de un caballo, cuestiones que no contestó en la extensa entrevista realizada ayer por la tarde.

Ríos explicó que “los problemas comenzaron cuando vivíamos en el departamento, yo ya embarazada de su hija. Él era muy celoso. Me celaba con el papá de Camila. Decía que no podía hablar si él no estaba presente y celaba la relación que Camila tenía con su papá".

"Un día el padre de Camila fue a buscarla porque tenía un régimen de visitas y, al volver Oris de trabajar y contarle que yo había estado hablando de Camila con su padre, se puso muy violento. Le dije que se vaya pero me empujo hacia adentro del departamento y me empezó a pegar patadas en la cabeza. Yo ya estaba embarazada de su hija. No hice la denuncia porque él dijo que iba a ir preso y que nadie iba a creer que me habían robado en la calle”, continuó.

Luego, explicó que cuando Oris se quedó sin trabajo no tenían cómo pagar el alquiler, por lo que tuvieron que mudarse. “A mi familia no podía ir porque les había cerrado las puerta culpa de él”.

Una vez en el rancho, Ríos explicó que Oris se puso "más violento y se enojaba por cualquier cosa. Oris intentó pegarle a Camila en varias oportunidades y yo no lo dejaba, y en esas oportunidades se descargaba conmigo", contó.

Además dijo que "siempre me pegaba con los puños y me apuntaba con un arma, un revólver y una escopeta. Camila le tenía el mismo miedo que yo. En una oportunidad nos apuntó y nos decía “a quien mato primero” y le suplicaba que nos dejara”.

Sobre los hechos ocurridos el día que Camilla fue internada, la mujer sostuvo que “yo creo que todo comenzó el jueves anterior, cuando ellos (Oris y Camila) regresaban del alto, que es el lugar donde iban todos los días porque es donde él tenía sus cabras, animales y el famoso caballo. A mí no me dejaba ir porque decía que yo tenía que cuidar a su hijo, porque llevaba un Oris en la panza. Me dejaba encerrada en el rancho. Entonces, al regresar, Camila venía con otra ropa, no era su ropa, por eso yo pregunté “¿Qué pasó?”, y él me contestó que la nena se cayó del caballo”.

Habló la mamá de Camila y se ocupó más de su situación personal que de clarificar el episodio
Alejandra Ríos contó por primera vez su versión de lo ocurrido el 25 de octubre pasado. No explicó por qué sostuvo la versión de Oris de que su hija se había caído de un caballo. Y se limitó a denunciar los supuestos malos tratos que ella sufría, no los que sufría su hija.
Sobre ese contexto, Ríos manifestó que "eso es imposible, porque Camila le tiene terror a los caballos, ya que tuvo una muy mala experiencia cuando tenía tres años y no se acerca a ellos. Entonces, él me dijo: “Vos cállate. Necesito que te callés, lo que yo digo es lo que se hace y mandó a que Camila se bañara”.

Luego, Ríos explicó que "entramos adonde nosotros dormíamos y me dijo: “te he dicho que nunca me contradigas en frente de la niña. Vos vas a hacer lo que yo te diga”, entonces me empujó contra la cama me empezó a pegar y me comenzó a asfixiar tomándome del cuello haciendo presión, me rompió la ropa, fue hasta la cocina, trajo el arma y me la puso en la panza, yo tenía casi 8 meses de embarazo, y me dijo: “te voy a matar. No me importa que lleves adentro un hijo mío. Yo te voy a matar”.

Según Ríos, "todo eso ocurrió el jueves. El viernes, al levantarme como todos los días, lo despierto para que nos preparemos, porque él nos llevaba todos los días a la escuela, y me dice: “no vamos a ir a ningún lado. Vos no te merecés nada, sos una mala mujer, andate sola” y yo le dije que Camila tiene que ir a la escuela, pero me contestó que “Camila no va a ir. Ella se va a quedar conmigo”.

Alejandra Ríos continuó contando que "estaba con tanto pánico, tanto terror, que agarré el auto y me fui, era mi último día de trabajo porque empezaba mi licencia por maternidad. Al regresar a la casa, a eso de la 1:45, entro al rancho y Camila estaba durmiendo con Oris y me pareció raro porque era muy temprano, entonces la voy a tocar a ella y él me dijo “no la toqués. Está durmiendo”. Le contesté que yo la quería tocar y darle un beso porque no la había visto en todo el día. Entonces me dijo: “no la toqués. No aprendes más. Te gusta que te peguen. Es la única manera que aprendés. Anda comé si querés, sino acóstate”. Por eso me recosté y Camila nunca se despertó en ese momento.”

Después, Ríos dijo que "alrededor de las 5 de la tarde, Camila se levantó, yo la escuché porque dormíamos separadas por una tela. Entonces me dijo que se van al Alto otra vez, le digo que quiero ir y me contesta que no. Camila sale del rancho, detrás de ella sale él y a los 5 minutos escucho que Camila empieza a llorar, entonces me pongo un pantalón, salgo corriendo y él ya venía con Camila en sus brazos, completamente mojada, su pelo, su ropa. Entonces empiezo a gritar "¿qué pasó?" y él me grita, “cállate que vas a despertar a todos”.
Por último, al concluir el crudo relato, Alejandra expresó que "una vez que entran, él le comienza a hacer respiración boca a boca, yo llamó a la ambulancia y le vuelvo a preguntar qué pasó y él me contesta: “ya sabés, se cayó del caballo y vas a hacer lo que te digo”, que fue lo que finalmente hizo Ríos en sus distintas declaraciones.