El inédito descubrimiento de maniobras fraudulentas en los documentos exigidos para convertirse en agentes o funcionarios públicos que actúan como auxiliares de la justicia, motivó que ya se empiece a pensar en cambios en el chequeo de la información aportada por cada aspirante a ingresar a la fuerza, ya sea para la escuela de agentes o suboficiales o para la de cadetes que serán los futuros oficiales de la institución. Según fuentes policiales, uno de esos cambios analizados a ejecutar en la práctica podría ser el pedido de informes al Ministerio de Educación para evitar sorpresas como las que se detectaron en la última semana. Ayer este diario intentó sin éxito confirmar oficialmente la versión en la jefatura de policía y en el Ministerio de Gobierno.
