Cariló es un pequeño balneario de la costa atlántica bonaerense, de unos 1.760 habitantes, protegido por una ley provincial de paisaje natural, donde las viviendas y hoteles se construyeron en medio de un bosque de 1.700 hectáreas.
Esta característica convirtió a este balneario, en el Partido de Pinamar, en uno de los más requeridos de la Argentina y lugar habitual de veraneo de deportistas, artistas, políticos y empresarios de alto poder adquisitivo. Alquilar una casa allí para el próximo enero, si aún se consiguen, cuesta como mínimo 35.000 pesos. Según el último censo, Cariló tiene unas 2.000 viviendas, aunque una gran proporción está desocupada durante gran parte del año, ya que los propietarios las utilizan o las alquilan sólo para el veraneo. Además, posee unos 50 hoteles. Por decisión de sus habitantes, que quieren preservar las características naturales del lugar, no existe tendido eléctrico aéreo.
