Los buenos resultados de las elecciones generales de octubre y el triunfo en el balotaje de noviembre, que ubicó a Mauricio Macri como el nuevo presidente de los argentinos, fueron los motivos para que haya un boom de afiliaciones en Propuesta Republicana (PRO), fundado por el actual jefe de Gobierno porteño. Sus referentes en San Juan retiraron 4.000 fichas de la Justicia Federal para satisfacer los pedidos de adhesiones que recibieron. Cuando las presenten, la fuerza política se irá a más del doble de miembros y pasará a ocupar el cuarto lugar en la provincia, detrás de los tradicionales PJ, UCR y PB y desplazando de ese puesto a Desarrollo y Justicia, fundado por el ex intendente Jorge “Coco” Abelín.

La cantidad de afiliados es lo que le permite a un partido político mantener la personería jurídico-política y poder presentar candidatos cada vez que hay una elección. Pero, además, es una demostración de poderío político frente a los otros rivales, aunque en la práctica a veces el número de seguidores no se traduce en votos en las urnas.

En San Juan, según sostienen los analistas y dirigentes de distintas fuerzas, el fenómeno que se presenta con el PRO no es nuevo, en el sentido de que cada vez que una fuerza nueva llega al poder, conquista más seguidores interesados en sumar su apoyo a esa propuesta.

Un dato particular es que si bien en la segunda vuelta Macri triunfó a nivel nacional por 2,8 puntos sobre su rival, el gobernador bonaerense Daniel Scioli, en San Juan no le fue tan bien porque acá el triunfador fue el exmotonauta, por poco más de 19 puntos. La cifra tiene su explicación en la fuerte presencia del Frente para la Victoria en el distrito, que logró imponer a su candidato a gobernador, Sergio Uñac.

En la práctica, muchas veces los partidos buscan inflar sus padrones. Según los analistas, las razones son varias. Por ejemplo, cuando una fuerza va a integrar un frente electoral necesita demostrarle a sus socios que tiene muchos afiliados para pelear una mayor cantidad de cargos en caso de llegar al poder. Los punteros políticos también se encargan de conseguir más adeptos para demostrar mayor poder territorial.

Pero las fuerzas no obtienen ningún incentivo económico ni beneficio electoral por mostrar padrones más nutridos. Los fondos que reciben los partidos están establecidos en la ley de financiamiento de los partidos políticos, que fijó un fondo partidario permanente que consiste en una partida anual del presupuesto nacional que maneja del Ministerio del Interior, de acuerdo a los votos obtenidos en la última elección.

Sí, en cambio, necesitan mantener un piso de afiliados, que es el 4 por ciento del padrón del distrito, actualmente de 536.349 electores. Con esa cifra la base es de 2.145 afiliados. Con ese número, hay al menos 7 fuerzas en San Juan que deberán incrementar sus padrones si quieren seguir en carrera.

Para evitar los padrones inflados, incluso un exdiputado oficialista ya fallecido, Eduardo Leonardelli, llegó a presentar un proyecto de modificación del Estatuto de los Partidos Políticos que incluía, entre las disposiciones transitorias, un artículo que proponía depurar los padrones a través de un proceso de reafiliación obligatoria pero que no llegó a prosperar. La propuesta pretendía transparentar el sistema para la convocatoria a elecciones internas abiertas y simultáneas para elegir los candidatos.