‘Acá jugaba yo de niño, pero mis hijos no lo van a poder hacer’, se quejó Marcelo González. El es un vecino de la plazoleta de la Perona, como la conocen en el lugar, y dijo sentirse perjudicado porque en muy pocos días el espacio de recreación empezó a ser cerrado por una pared y un alambrado olímpico. Junto a otros vecinos salió a reclamar porque afirmó que ahora los niños de los loteos Antez y Pérez Font, Rawson, se quedaron sin un lugar para jugar. Un centro de jubilados es el que realiza el cercado, tras conseguir la donación del terreno, y afirmaron que no habrá marcha atrás.
La plazoleta está ubica en el cruce de las calles Perona y Salvador María del Carril y forma un triángulo, delimitado hacia el Sur por la sede del Centro de Jubilados Renacer. Hay unos árboles, un par de bancos, una gruta, farolas y, de acuerdo a los vecinos, era el lugar elegido por los chicos para jugar. Sin embargo, hace unos días observaron la llegada de unos obreros que rápidamente comenzaron a levantar una pared y a instalar postes para un cierre con alambre romboidal. De acuerdo a los testimonios, nadie les preguntó si estaban de acuerdo o no con lo obra, a la vez que reclaman que la larga pared que ahora da a los frentistas de la calle proyectada del loteo Antez les deja un cono de sombra que genera inseguridad.
La presidenta del Centro de Jubilados Renacer es Etelvina Mercau y prefirió no opinar. Sin embargo, desde la entidad dijeron que la obra cumple con todos los requisitos legales y que pudieron encararla tras recibir ayuda municipal, pues el terreno fue donado hace 16 años. Además, indicaron que la plazoleta constantemente era dañada y que algunos vecinos hasta la usaban de estacionamiento. Allí, una vez que esté cercado el lugar, los socios del centro realizarán actividades físicas y de recreación, según indicaron.
El titular de Obras y Servicios de la Municipalidad de Rawson, Rubén García, indicó que la ordenanza 2.217 del año 1998 establece que el terreno dejó de ser un espacio verde para convertirse en propiedad del centro de jubilados, por donación municipal. ‘Cuando desde Renacer nos solicitaron asistencia, investigamos y efectivamente existe la ordenanza municipal y el decreto del por entonces intendente, Carlos Fernández. Es decir, nosotros actuamos en base a una ordenanza previa, jamás hubiésemos cerrado una plaza’, dijo.
