El entrenador del seleccionado argentino de vóleibol masculino, Javier Weber, se mostró "satisfecho" por el rendimiento de su equipo, pero "amargado" a la vez por la ajustada derrota por 3-2 sufrida ante Brasil, el mejor representativo del mundo y defensor del título, en la apertura de la fase final la Liga Mundial que se desarrolla en el Orfeo Superdomo, de Córdoba, en la que Argentina tiene que vencer hoy desde las 21 a Serbia para tener chances de clasificarse a las semifinales que se jugarán mañana.
"Argentina hizo un buen partido (ante Brasil), no tanto en el primer set, pero después jugó un muy buen vóleibol durante dos horas, algo que no venía realizando esta temporada, en la que el equipo no mostró regularidad", expresó el técnico argentino.
"Jugamos con la frente alta, caímos dignamente y ya pensamos en el partido de mañana (por hoy) ante Serbia", agregó Weber.
Por eso, el entrenador aseguró estar conforme con el rendimiento exhibido por el equipo, pero amargado por la derrota frente a los brasileños, máximos candidatos al título.
"Estoy satisfecho pero no quedé contento. Hemos hecho un gran partido, pero prefiero jugar mucho peor y ganar, ya que no me gusta perder a nada", remarcó.
Por otra parte, Weber sostuvo que es "bueno" que Argentina no haya jugado anoche -tenía fecha libre- porque, así, tiene la oportunidad de ver en acción a su próximo rival frente a Brasil.
"Esta noche (por anoche) voy a ver el partido entre Serbia y Brasil, para mañana (por hoy) poder enfrentarlo con más conocimiento de su actualidad", comentó.
"Sin dudas, Argentina sufrió un quiebre en su historia voleibolística, porque ha perdido 13 partidos consecutivos, pero la buena performance frente a Brasil, que se definió en el quinto set, marcará un punto en la mejora que ha tenido el equipo", puntualizó el entrenador.
"Esos traspiés, creo, le servirán de mucho a los jugadores ya que de la suma de derrotas se aprende porque son parte de la construcción de un gran equipo", aseveró.
