Dante es un sastre que le tiene fobia a la muerte. Pero la vida lo pondrá cara a cara con ella: su hermano gemelo muere y él ve "su propio rostro" en el ataúd. En ese momento, su realidad se distorsiona. Así se presenta Necrofobia, la primera película de terror argentina filmada íntegramente en 3D, que el mes pasado se alzó con el premio del público en Unasur Cine, luego de otros galardones en festivales internacionales; y que desde hoy se exhibe en Cinemacenter San Juan.

Luis Machín, Julieta Cardinali y Raúl Taibo, está Daniel De la Vega son los protagonistas de este thriller psicológico. "Al no haber una tradición de género, los actores saltan al vacío aferrándose a la mano del director. Sólo tengo palabras de agradecimiento para un elenco de primer nivel que confió en este proyecto’, dice Daniel De la Vega, el director que desde 1997 trabaja en el género y que decidió dar un paso más en cuanto a formato. "El terror y la tridimensionalidad, parecen haber nacido para estar juntos. Necrofobia es una historia de Terror psicológico en donde el 3D está para introducirnos en la cabeza de una persona que padece esta enfermedad. Me pareció que el 3D iba a estar al servicio de acompañar a Dante (Machín) en un viaje demencial en dirección al noveno infierno", comentó en charla con DIARIO DE CUYO el realizador, para quien poder instalar una producción nacional de este nivel en el público es el mejor reconocimiento. "Como director quiero que la película exista, para lo cual, se tiene que encontrar con la gente. En ese sentido, más allá del artificio tecnológico, el objetivo es proponerle al espectador una película argentina, distinta, para que pueda elegir en lugar de las mismas opciones americanas. Mi lucha es que los espectadores vuelvan a ver cine nacional", explicó De la Vega, para quien "el cine de género es una de las tantas respuestas viables a la demanda de un público hambriento de un cine distinto al que suele proponer nuestra industria".