Tras la desaparición de Sofía “se dijeron muchas maldades”, cuenta María Elena, en contacto telefónico con DIARIO DE CUYO. ‘”Dijeron que Sofía no era hija nuestra. Que mi esposo Fabián tenía deudas. El nunca fue a un casino. No teníamos deuda con nadie. De todos modos, éso queda en la cabeza de mucha gente. Hasta hubo una vidente que dijo que teníamos a mi hija enterrada en casa”.
Mientras espera que le llamen para darle alguna pista, la mamá de Sofía dice que “al comienzo me llamaban para decirme: tengo a tu hija. Dame plata a cambio. De todos modos, tengo toda la esperanza de que alguien me va a dar el dato para encontrarla”.
La mujer reconoce que se ocupa de Sofía todas las horas de sus días. “Estoy todo el tiempo pensando en mi hija. Estoy dividida en dos en mi casa, porque también tengo a mi hija Juliana que es muy demandante, quiere que juegues. Siento que no se le dedica el tiempo que se le tendría que dedicar”.