El jardín también hace su aporta en el mes de la navidad. Hay plantas que son típicas para celebrar. Podemos cultivarlas en casa o bien comprarlas en los viveros. Estos centros comerciales se llenan de opciones para poder decorar con seres vegetales, y luego continúan formando parte de tu jardín.
No debemos olvidar que se trata de seres vivos y no juguetes, por lo tanto la manipulación debe ser cuidadosa. Si utilizamos estas plantas como elementos decorativos, debemos tener en cuenta que requieren cuidados especiales. De hecho, hay algunas especies, como el acebo, que están en peligro de extinción.
El abeto, el árbol de Navidad
Su nombre científico es Abies alba Mill y sus nombres comunes son: Abeto blanco o común, Árbol de navidad. Su origen es de Europa. De la familia: Pináceas.
Es un árbol de hojas perennes, de 2 a 3 mm de ancho, son brillantes y con dos bandas blancas bien diferenciadas. Es el típico árbol de Navidad muy decorativo para parques y jardines. También puede mantenerse en maceta durante el mes de las fiestas, para luego trasplantarse. Alcanza una altura entre 30 a 50 metros. La siembra es directa. Se recomienda comprarlo en maceta, estas tienen que ser grandes y capaces de drenar el exceso de agua.
Hay que aplicarle abono orgánico y fertilizantes minerales.
Se suele regar diariamente, pero sin excesos, por lo que también se puede hacer esta acción cada tres días. Además necesita aire fresco constantemente.
No es muy exigente con la luz. Crece en climas fríos-templados, sin grandes oscilaciones térmicas. Resisten bajas temperaturas, por lo que requiere alta humedad ambiental y no resiste aires secos.
No se puede hacer la poda, salvo que tenga alguna rama seca, quebrada o que obstaculice una pasada. El suelo debe ser rico en nutrientes, fresco y profundo, pero también se adapta a vivir en suelos pobres. No se desarrolla ni en los suelos arenosos, ya que le resultan demasiado secos, ni en los compactos. Se reproduce por esquejes, semillas e injertos. Su floración tiene lugar entre abril y mayo. Las plagas del abeto suelen ser ácaros o araña roja y el pulgón, ambos dañan toda la estructura del árbol.
Sin duda, el abeto es la estrella de las fiestas navideñas. Comprar abetos en esta época es relativamente fácil ya que los viveros suelen tener. La falta del cepellón, es decir, del bloque formado por las raíces y la tierra son fundamentales para su existencia. Si se conserva en su recipiente o maceta, luego se puede trasplantar a tierra.
La Flor de Pascua
¿Qué sería una casa en Navidad sin una flor de Pascua? Aunque se pueden conservar durante varios años, es frecuente que una vez terminada la floración navideña, estas plantas se echen a perder debido al desconocimiento de su cuidado y mantenimiento.
Conocida con estos nombres Flor de Pascua, Poinsetia, Pascuero y su nombre científico Euphorbia pulcherrima, es originaria de México.
Sus vistosas brácteas las hay en diferentes colores: rojas, amarillas, salmón y blancas. Digo brácteas y no flores porque esos "pétalos" que vemos no lo son tal sino que se llaman botánicamente brácteas. Ocurre lo mismo con las Buganvillas o Santa Rita, que lo que llamamos flores son en realidad brácteas. Las flores salen en el centro de las brácteas y son pequeñitas y de color amarillo, sin valor ornamental. La Flor de Pascua se puede cultivar tanto en el interior de la casa como en el jardín. Fuera vive muy bien en climas cálidos sin heladas, llega a formar un arbusto grande de hasta 5 metros de altura.
No soporta las temperaturas elevadas, requiere de buena iluminación y de corriente de aire. El riego debe ser abundante, aunque sin pudrir. No debemos rociar con agua las hojas rojas, ya que se deterioran. Su reproducción puede ser por esquejes.
El muérdago
Las ramas de muérdago son muy habituales, sobre todo en países anglosajones, como adorno navideño en puertas y centros de mesa, porque se considera símbolo de buena suerte. Durante el siglo XIX, en Inglaterra y Francia, los mendigos pedían dinero durante las Pascuas con ramas de muérdago en la mano, de ahí que esta planta haya adquirido su connotación navideña. La tradición dice que aquella mujer que recibe un beso bajo el muérdago en Nochebuena encontrará el amor que busca o conservará el que ya tiene. Normalmente, si una pareja pasa por debajo de una puerta con muérdago, deben besarse si quieren que les proteja la buena suerte.
A menudo forma parte de pequeños ramos con otras plantas verdes, y casi siempre con bayas. Aparte de sus utilidades decorativas y asociadas a la superstición navideña, posee propiedades medicinales, antiespasmódicas y tranquilizantes, por eso se ha considerado muy útil contra la epilepsia, los vértigos y las convulsiones. Como muchas plantas, puede ser tóxico en grandes cantidades.
Se lo conoce también como Acebo, Cardón, Cardonera y su nombre científico es Ilex aquifolium. De la familia de las Aquifoliaceae.
Es originaria de la zona sur y oeste de Europa. Es un arbusto que se hace grande con los años e incluso árbol, puede superar los 10 m. de altura. De
hojas lustrosas con borde espinoso, perennes, de color verde oscuro en el haz y más claro el envés, de forma elíptica, muy duras, alabeadas y con espinas en los bordes. Existen muchas variedades de Ilex aquifolium, con diferentes tonos de hojas y frutos.
Sus flores masculinas y femeninas en distintos pies de planta (dioica, es decir, existen ejemplares macho y ejemplares hembra), pequeñas de color blanco; nacen de las axilas de las hojas solitarias o en ramilletes. El fruto es rojo, abayado, del tamaño de un guisante, muy llamativo, pero tóxico. Para conseguir frutos coloreados es preciso tener un ejemplar macho y otro hembra por ser una planta dioica. De lento crecimiento. Actualmente, es una especie protegida en varios lugares de Europa debido a la depredación salvaje a que fue sometido con objeto de servir de decoración en Navidad.
Se puede plantar como ejemplar único, aunque también es muy útil para formar cercos. Es una especie de sombra o semisombra, ideal para plantar bajo los árboles. El suelo debe ser con un pH neutro y bastante ácido. Vive en diferentes tipos de suelos y puede soportar incluso los climas más secos.
Tolera el frío y gusta de humedad ambiental. Conviene regarlo durante las temporadas de calor. Se debe abonar en la época de crecimiento. Soporta bien la poda, que se realiza a finales de otoño. Se puede propagar por semilla, estacas, injertos de púa o de yema, acodado y por división.