En Jujuy, entre los patrones más característicos de la cultura norteña y andina, se destacan la música, la danza y la gastronomía. En cuanto a las dos primeras manifestaciones, son muy referenciales el carnavalito y la cacharpaya, que es una comparsa que anuncia el carnaval por las calles de la ciudad. También se destaca el caporal, una danza tradicional originaria de Bolivia. Referido a la gastronomía, las empanadas jujeñas se distinguen por llevar recado (picadillo) de carne o pollo, cebolla, papa, arveja, cebolla de verdeo y huevo. Luego está el tamal, picante y similar a la humita, que es envuelto con chala de choclo, carne picada (charqui) y cebolla. Finalmente está el Guaschalocro, un locro con choclo, zapallo, queperí, habas, cebolla, ají y queso de cabra.
