Las enredaderas son plantas de tallos largos y volubles que se enredan sobre tutores o simplemente, trepan por paredes y distintas superficies. Por lo general tienen tallos lignificados o leñosos y pueden ser caducas o perennes. Algunas tienen flores vistosas, perfumadas y otras atractivos follajes.
Casi siempre se busca esta especie para satisfacer alguna necesidad. Puedes envolver un muro, tapar una pared en mal estado, formar un límite con un alambre o soporte, armar una glorieta o pérgola, vestir farolas y decorar cuanto nos de la imaginación. Todo es cuestión de necesidad o simplemente gusto.
Las enredaderas vienen envasadas, el pan de tierra debe estar en buen estado lo mismo que la planta, sin lastimaduras, con brotes nuevos, con el tutor bien colocado y por supuesto sin enfermedades. La plantación consiste en darle una buena ubicación de acuerdo a las necesidades de cada planta y variedad. La preparación de un buen sustrato de plantación es fundamental: el hoyo debe contener una buena tierra fértil rica en nutrientes orgánicos y un buen tutor. Es fundamental guiar el crecimiento de una enredadera desde el primer momento, de lo contrario sufriremos las consecuencias no deseadas para cumplir el fin propuesto.
