Con dos goles imparables de un Lionel Messi exultante y otro de Neymar, el Barcelona se impuso ayer por 3 a 0 al Bayern Munich alemán en el Camp Nou por el partido de ida por las semifinales de la Champions League de Europa, encaminando la difícil eliminatoria que se definirá el próximo martes en suelo alemán.
La Pulga, brillante, sentenció un apasionante duelo en menos de cinco minutos, con dos goles majestuosos. En el minuto 32′ del complemento, con un potente zurdazo, colocó la pelota en el primer palo, imparable para Neuer. Y en el minuto 35´ de la parte final, el argentino se plantó otra vez cerca del arco rival, regateó a Boateng, y superó a Neuer con un toque sutil que desató la euforia del Camp Nou que se puso de pie para aplaudirlo mientras coreaba incansable su nombre.
Por si aún quedaban dudas de la superioridad del equipo culé, Neymar, ya en tiempo de descuento (48′), se encargó de despejarlas con un gol de caño, tras una asistencia del crack rosarino, que con su talento hizo vivir a su equipo una noche mágica.
El duelo, de alto voltaje, comenzó con los dos equipos lanzados al ataque, lo que proporcionó al juego un ritmo vertiginoso.
Suárez dio el primer aviso a los 6 minutos del arranque, pero Neuer atrapó el balón con facilidad. Asistido por Messi, el uruguayo perdonó por segunda vez, en el minuto 11, cuando quedó solo delante del arquero y, por pensar demasiado, resolvió mal.
Los dos equipos presionaron y buscaron la pelota, y así el Bayern también llegó al arco azulgrana, cuando Lewadowski, de cabeza, dio un pequeño susto en el minuto 12. No obstante, por momentos los de Pep Guardiola tenían la iniciativa, pero a la contra, los de Luis Enrique seguían llegando con más claridad. Neymar tuvo en sus pies otra chance, con lo que Guardiola decidió cambiar el esquema de juego, y colocó 4 defensores, pensando en evitar una goleada. Poco después, sus jugadores tuvieron quizás una de las oportunidades más claras, cuando en el minuto 17, Muller centró para Lewandowski, aunque el hombre de la máscara terminó resbalándose solo delante de Ter Stegen. Pero también Messi pudo marcar en el minuto 21, al efectuar un remate desde la derecha, que se fue afuera. Pese al cambio de táctica, el Bayern no renunció a jugar y siguió presionando.
Parecía que faltaba un poco de calma en los culés para concretar el último pase o la definición, y llegó en el segundo tiempo. Lio fue el héroe que el Camp Nou esperaba, y resolvió con grandeza la eliminatoria. Destrozó la red de Neuer con un zurdazo y pocos minutos después regaló una obra maestra a la hinchada con un una jugada que dejó a un defensor rival (Boateng) desparramado en el suelo y al arquero, al que superó con un toque, derrotado y rendido a sus pies. Y como complemento le brindó una asistencia a Neymar, que para no ser menos, esperó a Neuer, amagó, y lo superó con un disparo que le pasó al grandioso arquero alemán entre las piernas.
