Desde 1934 en que fue fundado, recién setenta y siete años después el Museo de Bellas Artes Franklin Rawson llegó a su casa propia, un verdadero palacete que permitirá, entre otras cosas, exposiciones permanentes e itinerantes. Fue diseñado por dos arquitectos a su vez también artistas, Carlos Gómez Centurión y Gustavo Suárez, sumándose posteriormente, Laura Elizondo. Cuatro colecciones conformaron su reapertura en casa nueva: "Identidad del sur", ochenta obras de artistas argentinos a través de temas como política, identidad, paisaje y abstracción. También, "El arte en papel"; "Arte visual sanjuanino" y "La colección", propia del museo desde que nació hasta la actualidad en que continuó acrecentando su capital artístico. La inauguración fue presidida por el Gobernador de la provincia, la Directora del Museo, el Secretario de Cultura de la Nación y la Secretaria de Cultura de la provincia acompañados por dos artistas argentinos de nivel internacional: Marta Minujin y Rogelio Polesello. El vernisage estuvo a cargo de María José Echegaray con la coordinación de Pía y Carlota Graffigna.
