Tres hermanos que se ganan la vida como jardineros se quedaron con lo puesto luego de que un espiral provocara ayer en la mañana un dañino incendio en su casa de la manzana 1 del Bº Ruta 20, en Caucete. El fuego consumió 3 camas, frazadas, colchas, un ropero con prendas de vestir, 4 sillas, 5 pares de zapatillas, 2 ventiladores de pie, 2 bicicletas, 3 máquinas de cortar césped, 2 bordeadoras, documentación y $1.500. Por si fuera poco, las llamas destruyeron una habitación y el humo y el hollín afectaron el resto de la vivienda, contó José Ávila (45), uno de los damnificados.
Todo ocurrió a las 8 cuando José y su hermano Edgar (43, sufre esquizofrenia) dormían. Daniel (48), su hermano mayor, se fue temprano a trabajar en la cosecha y dejó en su pieza un espiral sobre una mesa de luz. En la Policía dijeron que el espiral se consumió y eso desató el fuego.
Lo cierto es que José y su hermano se despertaron por el humo y trataron de combatir las llamas. ‘Nos levantamos y empezamos a echar agua. Le agradezco mucho a los vecinos (unos 20) que nos ayudaron echando tierra y tirando agua con lo que tenían a mano’, señaló Ávila.
Sin embargo, y pese al esfuerzo de la gente, las llamas causaron grandes pérdidas. ‘Quedamos con lo puesto y encima se nos quemaron todas las herramientas. Pero no queda otra que seguir hacia adelante’, dijo José Ávila.