Una empleada de la planta permanente de la Municipalidad

de la Capital con la función de inspectora de Higiene y Bromatología dependiente de la Dirección de Comercio, fue detenida sobre las 20 de ayer sospechada de cobrar ilegalmente dinero al dueño de una tienda a cambio de no ejecutar su presunta amenaza de cerrarle el comercio por falta de una habilitación, dijeron fuentes del municipio.

La mujer, identificada por su apellido, Pinazo, tiene 57 años y fue detenida por policías de Defraudaciones y Estafas de la Policía luego de recibir de manos del comerciante una cantidad de dinero que exigía (se habla de la cantidad de 1.000 pesos) precisaron las fuentes.

El hecho había sido motorizado por el propio comerciante, que tiene su local en avenida Libertador. Con las primeras exigencias de la mujer se presentó en el municipio para explicar lo anormal de la situación. Y como en la Municipalidad ya tenían conocimiento de peticiones similares por parte de la empleada desde fines del año pasado y comienzos del actual, el propio intendente, Marcelo Lima, encabezó las gestiones para judicializar el caso y ponerle fin a la situación.

Así, el comerciante puso la denuncia en la fiscalía dirigida por Silvina Gerarduzzi con conocimiento del juez de Instrucción Pablo Flores. Aunque no trascendieron detalles del caso, se conoció que cuando hubo denuncia se armó un operativo tendiente a constatar la veracidad de la denuncia con la elaboración de un acta en la que se registraron los números de los billetes a entregar por parte del comerciante.

La entrega del dinero se formalizó anoche. Y fueron policías de Defraudaciones y Estafas quienes apresaron a la mujer cuando salía de recibir esos valores, precisaron las fuentes.

Ahora, las autoridades judiciales evaluarán las pruebas para decidir qué delito cabe imputar, incluidos el de cohecho (“coima”) o exacciones ilegales, dijeron.