Internacional, de Porto Alegre, con los mediocampistas argentinos Pablo Guiñazú y Andrés D"Alessandro en la formación inicial más el aporte del arquero Roberto Abbondanzieri en el banco y con la ventaja de haber ganado en México, buscará obtener la 51ra. edición de la Copa Libertadores de América cuando reciba a Chivas de Guadalajara, en el partido desquite de la final. El encuentro se jugará en el estadio Beira-Rio de Porto Alegre a partir de las 21.50 y será arbitrado por el colombiano Oscar Ruiz, a quien secundarán sus compatriotas Abraham González y Humberto Clavijo.
Al conjunto brasileño le alcanzará con un empate para sumar un título de la Libertadores más al conquistado en 2006, ya que la semana pasada se impuso por 2-1 en México, con goles convertidos en el segundo tiempo por Giuliano y Bolívar a través de sendos cabezazos, mientras que Adolfo Bautista había colocado en ventaja al local.
En tanto, Chivas necesita ganar por dos goles de diferencia para convertirse en el primer equipo mexicano campeón de la Libertadores.
Una victoria de los visitantes por la mínima diferencia llevará la definición del título a una prórroga y -si persiste el resultado- a una tanda de penales.
En el equipo "Colorado" brasileño, la principal preocupación es la de evitar que se repita la frustración de 1989, cuando el equipo fue eliminado en las semifinales de la Libertadores por el Olimpia paraguayo, al caer como local por 3-2 en la revancha tras haber ganado por 1-0 el encuentro de ida.
El entrenador brasileño encara la finalísima con varios problemas de lesión, que afectan al centro delantero Alecsandro y a los mediocampistas Tinca, Sandro y Pablo Guiñazú.
Los dos últimos se han recuperado bien en los últimos dos días, pero las lesiones de Tinga y de Alecsandro preocupan, y ambos podrían ser bajas en el duelo decisivo de esta noche.
