Ayer, tras un fuerte mareo, Joaquín Furriel fue trasladado al Sanatorio Los Arcos, cuando recién llegaba de España. Allí, se determinó que padeció un "infarto isquémico sin daño cerebral", detalló la jefa de prensa, Raquel Flotta. Y, hasta el cierre de edición, el actor de 41 años permanecía en terapia intensiva.
El primer parte médico indicó, entre otras cosas, que "está totalmente controlado y estará 48 horas en observación y con estudios complementarios. Se encuentra estable y sin ningún daño o secuela que pueda impedirle su vida normal y cotidiana".
