A partir de esta semana, los pequeños productores de chacras de hortalizas que están alrededor de los centros urbanos de los departamentos sanjuaninos tienen la oportunidad de postularse a recibir un aporte que no hay que devolver, para construir invernaderos que les permitan resistir las heladas o vientos y estirar la producción para aprovechar mejor los precios de venta. Eso será posible porque la Secretaría de Desarrollo Social y Agricultura Familiar que conduce Carla Campos dio luz verde al desembolso inmediato de $2,8 millones a San Juan para implementar una de las patas del programa nacional de Agricultura Periurbana, el plan denominado ‘’Producción Hortícola Bajo Cubierta’’, destinado a organizaciones de agricultores familiares y también a productores individuales. La finalidad del mismo es incrementar la superficie de cultivos hortícolas tales como tomates, lechugas, pimientos, berenjenas, espárragos, etc, en invernaderos; de modo que las plantaciones puedan desarrollarse con mejores resultados durante todo el año y soportar las inclemencias climáticas. Según los cálculos nacionales, en esta primera etapa, el programa beneficiará a más de 60 emprendimientos familiares de la provincia. ‘’Los productores deberán comunicarnos qué proyecto tienen, estamos pensando hacer unos 6 o 7 asociativos y los demás individuales’’, dijo el ministro de Producción, Marcelo Alós. ‘’El plan es para todos los productores del Valle de Tulum, donde mayoritariamente se encuentran, pero también tenemos idea de implementar dos o tres en Jáchal e Iglesia, y un par más en Calingasta’’, agregó. Los interesados deben presentar el proyecto en el Ministerio de Producción, donde se les otorgará el dinero para hacer el invernadero que deberá tener dimensiones chicas, de unos 800 metros cuadrados. ‘’Nosotros vamos a controlar la rendición de los fondos, pero son aportes no reintegrables’’, dijo Alós. El plan contempla entregar $50.000 a proyectos individuales y $150.000 a proyectos asociativos y en la cartera de producción no descartan que la provincia aporte fondos propios si los proyectos superan los aportes nacionales.

Requisitos

El programa es para chacareros chicos, que están cerca de las ciudades y que tendrán que estar inscriptos en el Registro Nacional de Agricultura Familiar (Renaf) o el Registro Único de Productores Agropecuarios (RUPA) provincial. Los productores no deben recibir ingresos extras -ya sea por jubilaciones, asignación universal, pensiones, etc- que superen los $10.742,55 al mes (el equivalente a 3 mensualidades del peón rural); mientras que los ingresos por la venta de las hortalizas que cultiva no deben superar los $297.973,8 al año o $24.831,15 mensuales (15 canastas básicas totales por mes de $1.655 cada una). No pueden tener contratados más de dos trabajadores permanentes, el mayor esfuerzo productivo debe ser aportado por el grupo familiar, lo mismo que la gestión y toma de decisiones del emprendimiento. Además, deben residir en el predio o a no más de 50 kilómetros de distancia y si tienen más de una unidad de producción, se acumulan. No hay límites a la apropiación de tecnología y a la superficie, pero Alós dijo que en la práctica ‘no tienen más de 20 hectáreas’.