La Dirección Nacional de Vialidad salió a festejar sus 80 años de existencia y tiró la casa por la ventana. Es que presentó equipos de última generación, cuya inversión fue de unos 15 millones de pesos, destinados a evaluar el estado del pavimento de las rutas nacionales de toda la región, incluyendo San Juan y San Luis.
Así presentó en sociedad dos equipos muy sofisticados que alivianarán la tarea y evaluarán las estructuras con más precisión. Por un lado presentaron el deflectógrafo Lacroix, que es un equipo que permite evaluar la estructura del pavimento mediante un ensayo no destructivo. Realiza el estudio mediante la aplicación de cargas que simulan las aplicadas por el tráfico real, facilitando la identificación de zonas débiles y deterioradas. Con las mediciones obtenidas permite modelar adecuadamente la estructura al momento del diseño o corregir la cinta asfáltica durante su construcción, según informaron los técnicos de Vialidad Nacional.
Por otro lado adquirieron el perfilómetro longitudinal, que es un equipo basado en la medida de distancias por medio de laser preparado para registrar perfiles longitudinales de las rutas, como así también tomar simultáneamente datos de su textura. Brinda las características de la superficie de la calzada, esta información es manejada por los proyectistas en el cálculo de refuerzos en el pavimento con el objeto de preservar la red vial otorgando un mayor grado de confort y seguridad para el usuario. Ambos equipos constituyen una de las adquisiciones más importantes de la repartición en el último año en la región.
Desde el 2011 a la fecha, Vialidad Nacional realizó una importante inversión para la mejora de las rutas que tiene en la provincia, sobre todo lo relacionado con la seguridad. Unos $400 millones fue lo que costaron las distintas obras, en las que se encuentra una de las más novedosas, como las vías de escape que construyeron rumbo a Calingasta.
