El capitán argentino Daniel Orsanic, con decisiones tan audaces como discutidas, fue uno de los protagonistas importantes en el histórico triunfo del equipo de Copa Davis frente a Gran Bretaña en Glasgow. Los resultados le dieron la razón a Orsanic, quien prefirió pensar la eliminatoria día a día antes que especular con lo que podría pasar al día siguiente. La primera gran decisión de Orsanic fue poner a Juan Martín Del Potro para enfrentar a Andy Murray, la figura local. El sorteo determinó que el tandilense y el actual campeón olímpico abrieran la serie y el argentino ganó una batalla memorable después de más de cinco horas de juego.
Ayer, Orsanic, aseguró ayer que ‘es un honor’ llegar a la final del torneo y que irán en noviembre a Croacia ‘con toda la ilusión’ para ganar el trofeo por primera vez. “Estoy orgulloso de los jugadores, de los que vinieron y los que apoyaron desde la casa. Los incluímos a todos. Es un honor jugar la final e iremos a Croacia con toda la ilusión. Ya tendré tiempo para pensar en Croacia, ahora hay que festejar el triunfo de la semi, pero sabemos que es un equipo muy poderoso. Tengo sangre croata, pero llevo la bandera argentina bien puesta”.
El capitán respaldó la estrategia que llevó adelante este fin de semana en Glasgow. “Había que arriesgar y lo hicimos. Si no salía bien me iba a ir tranquilo porque hicimos lo que pensamos que era mejor. Estábamos muy tranquilos antes de jugar”, destacó. Orsanic se refirió además a la decisión que tomó de hacer jugar a Leonardo Mayer en el último punto y relegar a Del Potro, quien le había ganado a Murray en un encuentro de más de cinco horas. “El partido del viernes significó un costo muy alto y decidimos que si le quedaba algo de energía a Juan Martín (Del Potro) jugara el dobles. Sabíamos que no podíamos usarlo hoy y por esto tomamos la decisión de que jugara Mayer”, explicó.
