Ernesto Sanz -52 años, mendocino de San Rafael, ex intendente, legislador provincial, senador nacional y miembro del Consejo de la Magistratura- tomó ayer las riendas del Comité Nacional de la renovada Unión Cívica Radical, después de años aciagos en los que estuvo al borde de la disolución. Sanz dice que "ha terminado la etapa de la resistencia -estuvimos a borde de la disolución- y se propone la construcción de una alternativa de gobierno para 2011. Asegura que habrá que trabajar por la democracia sindical ("con el post moyanismo").De Cobos dice que por ahora debería quedarse en la vicepresidencia, pero que si pretende ser candidato en el 2011 tendría que renunciar o pedir licencia. Promete que la nueva conducción de la UCR irá a los distritos donde más necesidad de recuperación del radicalismo haya. Y San Juan es un de ellos.

-Viniendo de un proceso político tan complejo.¿Qué UCR es la que pasó a conducir?

-Venimos de una etapa que podríamos llamar de la resistencia. Estuvo en juego nuestra supervivencia como partido, al resultado del gobierno de De la Rúa, las elecciones del 2003 y los intentos de los Kirchner por coaptar a nuestros gobernadores e intendentes, que implicaba el propósito de eliminar el radicalismo del sistema (como lo que intentó hacer con la UCR de Santa Cruz sin lograrlo). Esta etapa termina exitosamente, porque no sólo no pudieron eliminarnos del tablero, sino que nos convertimos en protagonistas, con un fuerte respaldo en las elecciones del 28 de junio. Lo que viene ahora, lo que me tocará, es la construcción de una alternativa con un programa de gobierno, que tenga lazos de cumplimiento en factores de poder concreto, que determine confiabilidad de que vamos a llegar al gobierno y poder cumplir ese programa.

-Cuáles son los temas prioritarios a construir?

-Por ejemplo abordar el tema sindical en el país. Que no sólo es democracia sindical, transparencia, libre elección de la obra social, transparencia, sino acordar con el sector sindical que te pueda acompañar, el post moyanismo, digamos. Hay actores para hacerlo, porque también el sindicalismo está viviendo una etapa final de todo un esquema de poder que se está cayendo a pedazos. Zanola preso, por ejemplo. Se les empieza a podrir por el lado de las obras sociales pero terminará pudriéndose por las conducciones gremiales. Hay sindicalistas que se dan cuenta y no quieren más de eso.

-Aceptan el bipartidismo que propone el gobierno con la reforma política.?

-Al país le hace falta recuperar, no se si el bipartidismo, sino bipolarismo. Es decir, yo no lo veo como 2 partidos tradicionales, sino coaliciones alrededor de los partidos tradicionales. Puede haber un pan peronismo de un lado y un pan radicalismo del otro. No hay sistema en el mundo que se haya sostenido con una fuerza dominante, fuere y las demás a su alrededor..

-Adhieren a las internas abiertas, simultáneas y obligatorias?

-De la ley de reforma que aprobó el Senado, el único aspecto en el que estamos de acuerdo es con el de las internas abiertas y simultáneas. Pero nos hace ruido lo de la obligatoriedad y vamos a cuestionarlo. Nos parece un avance del Estado sobre la libertad individual de las personas. El Estado no puede inmiscuirse en la selección de los candidatos.

-¿Qué temas son prioritarios para el nuevo Congreso?

-Esto no puede convertirse en un torneo a ver cuál ley les volteamos. Se trata de elegir pocas, pero con contundencia y un buen mensaje de unidad.

Elijo: Ley del Consejo de la Magistratura. Porque con un solo artículo, el de la composición vos le quitas al gobierno el derecho de veto en la selección de los magistrados y en su destitución. Con eso le envías un mensaje a la Justicia Federal argentina, con lo que le aseguras independencia.

Segundo, el tema de los recursos, el federalismo, las provincias, sometidas a la discrecionalidad en el manejo de los recursos. El impuesto al cheque, a las ganancias, la precoparticipación del ANSES, cualquiera de ellas, que implica la recomposición del sistema federal absolutamente desnaturalizado, distorsionado.

Tercero, la delegación de superpoderes. Cuarto, La normalización del INDEC para volver a devolverle confiabilidad.

-Les han dejado temas pendientes muy gruesos…

-Efectivamente. Se trata de desactivar varias minas que este gobierno ha dejado sembradas, como el asunto de las tarifas, los subsidios cruzados y el otro embrollo de la cuestión federal. Sinó, todo esto le va a explotar en las manos a quienes pretendan ordenar el país en el 2011.

-¿Cómo queda el papel de Cobos en la UCR y en el nuevo Congreso?

-Con el Congreso que se viene no me animaría pedirle la renuncia a la vicepresidencia a Cobos, porque en una de esas tendrá que desempatar varias veces. Pero si Cobos quiere ser candidato en el 2011 y lo acompaña el viento de cola que tiene actualmente, él tendría que pensar seriamente en renunciar o pedir licencia. Pero tiene que desbrozar el obstáculo de ser vicepresidente porque en ese caso será incompatible.

-Pero él y su gente está plenamente integrado a la UCR?

-El no. Porque la Convención de Mar del Plata estableció que mientras él sea vicepresidente no puede estar afiliado. Pero en los hechos si lo está. Tiene una vida partidaria no a full, pero activa. Su gente está integrada, si. Laura Montero es Secretaria General de la UCR, por ejemplo. Hay un proceso de reunificación muy fuerte del radicalismo.

-Cómo figura San Juan en estos nuevos tiempos de la UCR.?

-Estuve con 3 de sus máximos exponentes. La nueva conducción del radicalismo no se quedará en la construcción de una alternativa nacional. De manera que irá a los distritos donde más necesidad de recuperación del radicalismo haya. San Juan es un de ellos. Y vamos a ir ayudar a recomponerse a los radicales de San Juan. Eso a nosotros nos ayudará a recuperar identidad nacional, volumen nacional.