"Una de las principales quejas de los turistas que llegan al parque es el estado del circuito", comentó Jorge Rivera, coordinador adjunto del Ente Autárquico Ischigualasto. Es que el circuito de 42 km por el que los turistas recorren el Valle de la Luna es de tierra, se anega cuando llueve y se levanta mucho polvo cuando está seco y pasan los vehículos. Ahora están haciendo una prueba piloto para ver si encuentran una solución: están rellenando el terreno y colocando sales químicas para compactarlo. El sistema es ventajoso porque el resultado es similar al de una calle asfaltada, el piso queda compacto (como si estuviera mojado), no se rompe y no se levanta tierra. Además es muy fácil de colocar. Pero el problema es que tiene un costo altísimo: la inversión para colocarlo sólo en 6 km es de alrededor de 100.000 pesos.
El sistema ya fue usado con éxito para mejorar la calle 14, en Pocito, y el camino que va desde Tudcum hasta el emprendimiento minero Veladero, en Iglesia. En Ischigualasto lo van a implementar en los 6 km más complicados del camino y, si funciona, quieren extenderlo a todo el circuito. Pero, para eso, tendrán que conseguir fondos externos al ente.
Los turistas no tienen problemas, soportan el calor en medio del desierto y aprovechan las vacaciones de verano para recorrer el Valle del Luna. De hecho, este año, la cantidad de turistas que llegó al Parque Autárquico Ischigualasto en los primeros veinte días de enero superó los niveles de visitas del año pasado (ver aparte). Pero el verano es también la época en la que más llueve en la zona y ésto perjudica el estado del camino.
Por ejemplo, en el verano de 2006, un año muy lluvioso, el circuito del parque quedó anegado 7 veces. Por eso, en muchos casos los turistas debieron volver a sus casas sin conocer el parque. Rivera aclaró que, a pesar de esta obra, es posible que si llueve siga habiendo cortes en el camino, por el paso de los ríos que lo surcan. Pero que no quedará anegado por completo ni se romperá, por lo que los vehículos podrán seguir circulando por los tramos que no estén inundados.
Según comentó el Coordinador, cada vez que se anega el circuito pasan máquinas para compactarlo y por eso, se ha formado una especie de canales en el medio de la calle, que dificultan aún más el tránsito de los vehículos. Para solucionar este inconveniente están rellenando esos canales.
En cuanto al sistema de compactación, funciona con el uso de sales químicas. "Es un sistema que estamos aplicando por primera vez. Lo estamos poniendo en 4 sectores del recorrido, que son los que están en peores condiciones", detalló Rivera. Uno de ellos es el que va desde el ingreso del parque hasta la formación conocida como El Gusano. Otros son dos tramos del Valle Rogelio Díaz Costa, uno que está en La Llave (que queda después del Valle Pintado) y otro en el tramo que hay antes de la llegada a la Cancha de Bochas. Y el cuarto sector comprende desde 1,5 km antes del Submarino hasta la base de esa formación.
Según Rivera, ese sistema es el único que encontraron para mejorar la calle que recorre el valle, ya que no se puede asfaltar, porque deben conservar sus cualidades naturales. Además, la colocación de las sales es muy sencilla, se distribuye un líquido con un camión tanque, dos o tres veces, y se compacta con una máquina. Y, a medida que van pasando los vehículos que recorren el circuito, la calle se va compactando más.
En cuanto al impacto ambiental, Rivera aclaró que "es una solución biodegradable, no contamina el ambiente".
