Vocalista, compositor, guitarrista; Iván Noble garúa en el lunfardo del rock desde sus tiempos de Caballero de la Quema. Hoy, en su enrulada carrera solista -camino que emprendió en 2003-, vuelve a San Juan con los éxitos de Dicho y hecho, para recordar las "mochilas cansadas’ de Avanti Morocha y navegar en los "barcos piratas de madrugada" de Dame un Motivo.
Acompañado por el pianista Sufián Cantilo y con su guitarra al hombro, hará posta con un acústico cuyo fin es "volver a la semilla de las canciones", como expresa. La cita es este jueves a las 21.30 en el Teatro Sarmiento, la venta de entradas anticipadas es en Tarjeta Data y el precio es $53, $73 y $83
Nacido un 5 de marzo de 1968 en Morón; este poeta del arrabal porteño creció escuchando una milonga ecléctica de estilos que danzaba entre Sui Generis y Arco Iris, Mercedes Sosa y León Gieco, The Beatles y, por supuesto, el tango.
Ahora, emperrado con patear para adelante y detenerse en mirar para atrás solo para hacer una "visita de médico" -como dice-, habló con DIARIO DE CUYO sobre su ex esposa Julieta Ortega, su fugaz romance con la actriz Silvina Luna y los amores frustrados como inspiración de sus canciones.
– ¿Es necesario volver al pasado?
– Y sí, pero con una visita de médico, si no no avanzás nunca. Es bueno hacerlo con una mirada cariñosa, como una suerte de balance.
– ¿Tu tiempo en Caballeros de la Quema merece una mirada cariñosa?
– Por supuesto que sí.
– Aunque habrá tenido momentos malos…
– Si, de todos modos, cuando me detengo a mirar toda esa época lo hago con una sonrisa, no me arrepiento de nada.
– Si algo caracterizan tus canciones y tus discos es que están marcados por el momento que atraviesa Iván como persona.
– Cuando uno hace canciones que se parecen a uno, terminan siendo fotos.
– Buena manera de hacer terapia
– Es una forma de bucearse a uno mismo, es difícil ir a lo hondo pero lo intento en algunas canciones. Sin embargo, aunque ayudan, a veces hay que ir a terapia (risas)
– Sentís que Caballeros te sirvió para construir tu presente?
– Uno es de donde viene. Pero lo que hago es ir creciendo, es más no pienso en el disco que saqué en 2009 y que estoy presentando; al día de hoy ya estoy componiendo para el disco que voy a lanzar a principios el año que viene. Siempre estoy en fuga.
– ¿Le huís a la quietud?
– No quiero ser una estatua. Por eso hay que mirar para adelante.
– Sin embargo, como solista también pasas revista al pasado como en Dicho y Hecho.
– En este caso fue distinto, cuando me propusieron un disco en vivo lo quise hacer con temas reversionados por eso invité a Mariano Otero, alguien que no viene del rock, para que le pusiera otra ropa a las canciones.
– ¿Con qué te encontraste en esa revisión musical?
– Algunas canciones me pedían revancha y me di el gusto de grabarlas mejor.
– ¿Cómo influye el desamor en tus creaciones?
– El desamor es mi gran motor, más que el amor. Las canciones que más me gustan, ajenas y propias, son las que hablan de amores descarrilados.
– ¿Cómo está tu relación con Julieta Ortega, tu ex esposa?
– Julieta fue mi mujer siete años, es la madre de mi hijo Benito y, hoy por hoy, mantenemos una relación de respeto y absoluto cariño.
– ¿Y con Benito? ¿Pensás en sumarlo a tus giras?
– Es muy chiquito, tiene casi 5 años. Pero tengo ganas de empezar a subirlo en algunos shows porque le gusta mucho la música, le fascina.
– ¿Por qué crees que tuvo un efecto tan mediático tu romance con Silvina Luna?
– Son asuntos de los que prefiero no hablar.
– ¿El seguimiento de la prensa te juega en contra para entablar una nueva relación?
– Es probable que algo de eso haya, pero prefiero pensarme como un tipo que hace canciones que me salen bastante. Lo que hago debajo del escenario es territorio mío, es difícil evitar que te intruseen en eso, pero no hay que poner tanta energía en enojarse
– ¿Cuál es la mujer ideal?
– Cameron Díaz
– ¿Siempre famosas? ¿Cómo no querés que te siga la prensa?
– Me enamoro cinco veces al día pero doy vuelta la esquina y no las veo más, ¡que le voy a hacer!
– Del Iván de Avanti Morocha al de Preguntas equivocadas. ¿Qué balance hacés?
– Estoy contento, feliz. Más viejo, más mañoso y espero…más sabio.
– ¿Y con más experiencia?
– Si eso sí, pero viste lo que dicen de la experiencia, que es un peine que te dan cuando te quedaste pelado…
– Más viejo pero con Facebook
– Si, pero sigo siendo un analfabeto en eso. Las redes sociales comunican pero no estoy seguro que acerque a las personas.
– ¿Te propusieron volver a ser un Caballero?
– Tuve una propuesta en 2009. La verdad que cuando ocurra tiene que surgir como decantación, como un reencuentro muy puntual de dos o tres shows y nada más, no me lo imagino como proyecto.
– A lo Soda Stereo…
– Más eso que lo que hicieron Los Fabulosos Cadillacs que también grabaron un disco, eso ni me lo imagino.
