San Juan, 14 de septiembre.- Tras un domingo agitado, cargado de rumores que iban desde decenas de muertos hasta un río contaminado, que terminó con buena parte de los jachalleros en la calle, frente a la Municipalidad a la espera de respuestas, el lunes amaneció con una tensa calma, pero con una normalidad total en las actividades.

Anoche no fueron pocos los que se hicieron con botellones de agua para tratar de suplir un supuesto problema en el suministro. Esta mañana esa voracidad por ir a comprar agua no fue tal, aunque los kiosqueros reconocieron "un poco más de ventas". En un principio, no hubo avivadas por parte de los comerciantes que apunten a subir los precios.

En otro orden, una de las versiones del domingo a la noche apuntaba a que el dictado de clases hoy iba a ser suspendido, cosa que no ocurrió y la mayoría de los padres alistó a sus hijos para que asistan a los establecimientos educativos.